El incendio se produjo al arder un colchón por una colilla mal apagada en una vivienda de la Malvarrosa
Un anciano de 90 años y su hijo resultaron intoxicados por inhalación de humo en el incendio de una vivienda de Valencia. La valiente y rápida actuación de los primeros policías locales que llegaron a la casa en llamas evitó lo que podría haber sido una nueva tragedia.
El siniestro tuvo lugar minutos después de las nueve de la mañana del viernes en un piso humilde del barrio de la Malvarrosa, concretamente en el número 15 de la calle Ingeniero Manuel Maese. Cinco patrullas de la Policía Local y Policía Nacional de Valencia y una decena de bomberos se movilizaron con urgencia. Los primeros agentes municipales que llegaron al lugar vieron cómo salían llamas de la ventana de una vivienda en la cuarta planta del edificio.
De inmediato, tres policías subieron las escaleras en pocas zancadas y otro agente cortó el tráfico en la calle para facilitar el acceso y la intervención de los bomberos. Cuando llegaron al rellano, la puerta de la casa en llamas estaba abierta y un hombre de 47 años, Javier Muñoz, llamaba a su padre. Los policías temían por la vida del anciano que estaba dentro de la vivienda. El humo ya había inundado todo el piso, y por ello, decidieron entrar a gatas para rescatar a la víctima. Los tres agentes cogieron en volandas al hombre y lo llevaron hasta el rellano del tercer piso. El salvamento duró pocos segundos.
Poco después, Ramón Muñoz, de 90 años, fue asistido por un sanitario de los bomberos. El anciano sufrió quemaduras leves en la cara y una intoxicación por inhalación de humo. El incendio destruyó totalmente una habitación, donde se inició el fuego, y el humo afectó al resto de la vivienda.
Según las primeras investigaciones policiales, una colilla mal apagada prendió un colchón en el dormitorio del hijo del anciano. Todo parece indicar que podría ser la causa del incendio. El hombre también resultó intoxicado por inhalación de humo, por lo que fue trasladado con su padre al Hospital Clínico.
En las labores de extinción del fuego y ventilación del edificio participaron cuatro vehículos con sus dotaciones de bomberos del parque Norte. El siniestro causó una gran revuelo en la calle Ingeniero Manuel Maese. Un grupo de vecinos y curiosos se congregaron en el lugar para observar cómo los bomberos sofocaban el incendio. Entre sus comentarios se repetían palabras de elogio para los policías locales que rescataron al anciano.
Un anciano de 90 años y su hijo resultaron intoxicados por inhalación de humo en el incendio de una vivienda de Valencia. La valiente y rápida actuación de los primeros policías locales que llegaron a la casa en llamas evitó lo que podría haber sido una nueva tragedia.
El siniestro tuvo lugar minutos después de las nueve de la mañana del viernes en un piso humilde del barrio de la Malvarrosa, concretamente en el número 15 de la calle Ingeniero Manuel Maese. Cinco patrullas de la Policía Local y Policía Nacional de Valencia y una decena de bomberos se movilizaron con urgencia. Los primeros agentes municipales que llegaron al lugar vieron cómo salían llamas de la ventana de una vivienda en la cuarta planta del edificio.
De inmediato, tres policías subieron las escaleras en pocas zancadas y otro agente cortó el tráfico en la calle para facilitar el acceso y la intervención de los bomberos. Cuando llegaron al rellano, la puerta de la casa en llamas estaba abierta y un hombre de 47 años, Javier Muñoz, llamaba a su padre. Los policías temían por la vida del anciano que estaba dentro de la vivienda. El humo ya había inundado todo el piso, y por ello, decidieron entrar a gatas para rescatar a la víctima. Los tres agentes cogieron en volandas al hombre y lo llevaron hasta el rellano del tercer piso. El salvamento duró pocos segundos.
Poco después, Ramón Muñoz, de 90 años, fue asistido por un sanitario de los bomberos. El anciano sufrió quemaduras leves en la cara y una intoxicación por inhalación de humo. El incendio destruyó totalmente una habitación, donde se inició el fuego, y el humo afectó al resto de la vivienda.
Según las primeras investigaciones policiales, una colilla mal apagada prendió un colchón en el dormitorio del hijo del anciano. Todo parece indicar que podría ser la causa del incendio. El hombre también resultó intoxicado por inhalación de humo, por lo que fue trasladado con su padre al Hospital Clínico.
En las labores de extinción del fuego y ventilación del edificio participaron cuatro vehículos con sus dotaciones de bomberos del parque Norte. El siniestro causó una gran revuelo en la calle Ingeniero Manuel Maese. Un grupo de vecinos y curiosos se congregaron en el lugar para observar cómo los bomberos sofocaban el incendio. Entre sus comentarios se repetían palabras de elogio para los policías locales que rescataron al anciano.