Las bajas temperaturas vaciaron ayer las calles de la región y propiciaron nevadas por encima de los 800 metros en varios puntos de la Cordillera. Las precipitaciones intermitentes complicaron además la circulación en algunos concejos, hasta el punto de que fue necesario el uso de cadenas para transitar por cinco puertos de montaña: La Raya (Aller), Leitariegos (Cangas del Narcea), Tarna (Caso), Somiedo (Somiedo) y Ventanta (Teverga). El de La Cubilla, en Lena, permaneció cerrado desde el pueblo de Tuiza. En la costa, el viento reinó durante toda la jornada. El ambiente gélido proseguirá hoy, con mínimas en el interior de menos tres grados.
Calefacción encendida y un buen caldo para reponerse del mal tiempo. Así pasaron ayer el día muchos vecinos de los concejos montañosos. Fue el caso de Carmen Fernández, de Teverga. "Ya ha llegado el frío de verdad", aseguraba por la mañana esta mujer. Y añadía que las heladas "tienen pinta de que van a ser terribles". En este concejo, la circulación se complicó especialmente en el puerto de Teverga, donde la nieve y el hielo se hicieron dueños de la calzada.
Además, el mal tiempo dejó los montes vacíos. Ni en la Senda del Oso ni en el resto de las teverganas se pudieron ver paseantes. Y la poca presencia de visitantes también se notó en la hostelería. Los bares y restaurantes estuvieron animados tan sólo por los vecinos de toda la vida.
Los copos cubrieron ayer también la localidad cabraliega de Sotres, "aunque la nieve fue muy aguada", tal y como contaba Tomás Fernández, uno de los responsables del refugio de Urriellu, cerrado desde el pasado día 15. Las precipitaciones no impidieron la circulación en ningún momento gracias a la frenética actividad de la máquina quitanieves. "Pero si no hubiera pasado, se hubiera circulado igual", señalaba Vanesa Fernández, del hotel rural Peña Castil, también en Sotres, donde están acostumbrados a imágenes mucho más impactantes.
Pese a que no está en el Picu Urriellu, Tomás Fernández mira cada día la cámara web y, según señalaba, ayer se veía en la cima "una nevada curiosa". El refugio estará cerrado hasta el 15 de marzo, pero el cuarto en el que duermen los guías por el verano quedará habilitado para algún atrevido que decida desafiar a la montaña en pleno invierno. "Siempre hay alguno, el año pasado siete u ocho antes del inicio de la primavera", afirmaba Fernández, antes de advertir de que "subir es peligroso porque es una zona de aludes".
Las estampas invernales abundaron también en otros concejos del Oriente, como Cangas de Onís. Las lluvias de las últimas jornadas en el área de los Picos de Europa propiciaron que las resurgencias de Covadonga, como "el Chorrón" de la Santa Cueva o "la Cola de Caballo" del Jardín del Príncipe, se convirtieran en un atractivo para los visitantes que se acercaron al santuario mariano. Porque fueron decenas los turistas que aprovecharon la visita, pese a la desapacible meteorología, a la denominada "cuna" de la Reconquista para inmortalizar con sus móviles y cámaras las espectaculares panorámicas de la Naturaleza.
Las fuertes rachas de viento complicaron el paseo en muchos puntos del litoral. Y provocó algunos destrozos, como la caída de un roble varias veces centenario en la localidad de Arenas, perteneciente al concejo de Soto del Barco. El oleaje moderado hizo acto de presencia durante toda el día, especialmente por la tarde. Para hoy, más frío, más nieve y más viento en toda la región.
