El Gobierno mexicano afirmó hoy que los siete ocupantes del avión
mexicano que fue destruido el pasado lunes por militares venezolanos
presentaron identidades falsas, lo que está dificultando las
investigaciones del caso.
Según informaciones procedentes de
Caracas, la aeronave era un avión privado bimotor, modelo Hawker 25, con
matrícula XB-MGM, unas iniciales que corresponden a México. Tanto la
tripulación como los pasajeros están en paradero desconocido.
La
aeronave despegó desde el estado central de Querétaro y a partir de
allí se le perdió el rastro en México, hasta aparecer el pasado lunes
por la noche, cuando fue forzada a aterrizar y el aparato fue incendiado
en tierra por militares venezolanos.
"Para abordar el avión
toda la información que dieron es falsa. Presentaron credenciales falsas
los propios pilotos", afirmó el secretario de Gobernación de México,
Miguel Ángel Osorio Chong, en declaraciones a la emisora local Radio
Fórmula.
"Eso ha dificultado tener mejores o mayores datos, y
por supuesto que estamos ya en comunicación con el Gobierno de Venezuela
para lograr saber primero quiénes iban, si eran mexicanos y ver si
había algún vínculo con la delincuencia", agregó el alto funcionario.
"Pero la dificultad comienza cuando los que abordaron el avión llevaban todos identidades falsas", insistió.
Osorio
añadió que el lugar donde fue obligada la aeronave a aterrizar estaba
lejos del puesto militar que se encargó del caso, por lo que "se
tardaron un poco y eso dio oportunidad para que los que iban a bordo
pudieran desaparecer".
Previamente, el secretario de Gobierno de
Querétaro, Jorge López Portillo, había proporcionado los nombres que
usaron los ocupantes de la aeronave antes de que el avión despegara
desde Querétaro.
Los ocupantes se identificaron como Carlos
Alfredo Chávez Padilla (piloto), Mauricio Pérez Rodríguez (copiloto),
Isaac Pérez Dubond, Susana Bernal Rivas, Adriana Gesabel Cruz Méndez,
Sergio David Franco Moga y Manuel Eduardo Rodríguez Benítez.
El
gobierno de Venezuela aclaró ayer a la cancillería mexicana que los
ocupantes del avión, para servicio privado, abandonaron la aeronave
antes de su "inhabilitación".
La aeronave fue incinerada por
militares venezolanos una vez fue localizada, siguiendo un protocolo de
las autoridades de ese país.
No se ha informado oficialmente del
cargamento que podría haber transportado el avión ni de la razón por
cual que fue obligado a descender a tierra.