Los desprendimientos han llevado a que se hayan cortado al tráfico
algunas carreteras del territorio. Las alertas por desbordamientos en
los ríos se han reducido, pero se mantiene la alerta naranja por lluvias.
Las malas condiciones climáticas han llevado a complicar el tráfico
en las carreteras guipuzcoanas. No obstante, la situación en los ríos de
Gipuzkoa se ha estabilizado, después de unas horas en las que se ha
estado pendiente del caudal de los mismos. Para este sábado se mantiene
la alerta naranja por lluvias y amarilla por fenómenos costeros.
El Departamento de Tráfico del Gobierno Vasco informa que se ha
cortado al tráfico la Gipuzkoa-2730, a la altura de Oñati, en el barrio
Zubillaga, debido a un desprendimiento que ha afectado a parte de la
calzada. Asimismo, la Gipuzkoa-3730, en Alkiza, también se encuentra
cortada por desprendimientos. En el límite con Bizkaia, la carretera
Bizkaia-632, en Kanpanzar, también se encuentra cortada por
desprendimientos. Las mismas fuentes indican que otras carreteras de la
red secundaria guipuzcoana se encuentran cortadas por balsas de agua y
desprendimientos. Por este motivo, aconsejan circular con precaución.
Además, se circula con dificultad en Villabona, después de que un
vehículo, que iba en sentido Donostia, se saliese de la calzada. El
suceso no ha dejado ningún herido.
El nivel de alerta en los ríos guipuzcoanos ha descendido. En el día
de ayer, la cuenca del río Deba estuvo en alerta roja por inundaciones
en Oñati, en alerta naranja San Sebastián, San Prudentzio y Altzola
mientras que la cuenca del Oria está en alerta amarilla.
Precipitaciones y tormentas este sábado
Los cielos del País Vasco se presentan hoy cubiertos, caerán
precipitaciones persistentes ocasionalmente fuertes y con tormentas en
el litoral, la cota de nieve se situará entre los 600 y los 500 metros y
bajará hasta los 400 metros, y las temperaturas descenderán
progresivamente a lo largo del día.
Según ha informado la delegación territorial de la Aemet, los vientos
soplarán hoy del oeste y noroeste fuertes en el litoral y con rachas
muy fuertes en zonas altas del interior al final del día.
Para mañana se esperan cielos cubiertos, lluvias generalizadas y
persistentes que podrían ser fuertes y acompañadas de tormentas, cota de
nieve entre los 300 y los 500 metros, temperaturas sin cambios o en
ligero descenso, heladas débiles en zonas medias y altas y vientos del
noroeste a oeste, fuertes en el litoral.
Las temperaturas mínimas registradas esta madrugada fueron de 5
grados en San Sebastián, 7 en Bilbao y 2 en Vitoria, mientras que se
esperan máximas de 9 grados en las capitales guipuzcoanas y alavesa y de
12 en la vizcaína.
El estado de la mar, en el Cantábrico hasta las 20 millas, es de
fuerte marejada que aumentará a gruesa o muy gruesa, la mar de fondo del
noroeste levantará olas de entre 4 y 5 metros, que disminuirán hasta
los 2 o 3 metros al final del día, y los vientos soplarán del oeste o
noroeste de fuerza 4 a 5, aunque arreciarán a fuerza 6 a 7.
Pocas lluvias por la noche
Una noche con pocas lluvias ha aligerado los problemas causados por
el temporal en el País Vasco, donde se han desbordado algunos ríos,
inundando garajes, lonjas y huertas, a lo que se ha sumado el corte de
varias carreteras secundarias, pero sin heridos ni problemas de
gravedad.
Gipuzkoa estuvo ayer en alerta por el caudal de algunos ríos, aunque
la situación ya se ha calmado. Se ha desalojado el poblado de chabolas
de Astigarraga, y sus ocupantes han pasado la noche en un albergue
municipal.
Además, ha habido pequeñas inundaciones en garajes, empresas cercanas
a los ríos en zonas como las cuencas del Deba en Oñati, el Oria o el
Urumea.
En las carreteras las intensas lluvias de ayer han dejado balsas de
agua y desprendimientos, aunque ninguna carretera principal está
cortada.
Entre las vías más afectadas está el puerto de Barazar, cortado en
los dos sentidos por desprendimiento, la N-240 en Areatza, donde hay
paso alternativo esta mañana por la caída de un árbol, en GI-2630 en
Oñati o en Gatika por balsa de agua.
Precaución en Bizkaia y Álava
Los cauces han bajado de nivel; la ría de Bilbao sólo se ha salido un
poco a medianoche a su paso por Zorrotzaurre, y el Ayuntamiento ha
desactivado el plan de emergencia municipal.
Las afecciones problemas en la capital vizcaína han sido así menores:
debido a escorrentías de aguas en las laderas ha habido problemas en
los barrios de Zurbaran y Peñascal y desprendimientos en Masustegi y
Kastresana. En la zona del teatro Arriaga por imposibilidad de desaguar
se han levantado algunas arquetas
El principal problema en Euskadi ha estado en el vizcaíno río
Cadagua, que ya desde la tarde se salió de su cauce en localidades como
Güeñes, Alonsotegi, Balmaseda o Zalla, donde algunas personas no
pudieron acceder a sus viviendas y fueron realojadas.
Garajes, coches y locales se han visto inundados, con medio metro de
agua en algunas calles, pero no ha habido daños en personas.
Otros pequeños ríos vizcaínos también se han desbordado ligeramente, como el Ibaizabal en Galdakao y Etxebarri, o el Asúa.
En Álava las precipitaciones no han tenido tantas consecuencias y lo
que más preocupa es la nieve que pueda caer hoy. También ha habido
algunos desbordamientos de cuencas en Luyando u Okondo, y en la zona de
Nanclares donde el Zadorra ha anegado la antigua carretera N-1.
Además, el embalse de Ullibarri ha aumentado su desembalse a 40
metros cúbicos por segundo en previsión de que siga lloviendo, para que
tenga más capacidad de recoger agua.
Hoy sábado, aunque la alerta naranja por lluvias está en vigor
oficialmente hasta el mediodía, a las ocho de la mañana no llueve; la
preocupación se trasladará a partir del mediodía a Alava, por la nieve,
ya que se espera que la cota baje a partir de la tarde hasta los 300
metros.
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