- Una familia se niega a abandonar su casa, amenazada por una riada de un metro de alto
- Casar de Periedo, entre las localidades más afectadas por las inundaciones
Los agentes de la Guardia Civil procedieron a abrir la verja exterior de la casa para acercarse a los afectados, que no cedieron ante las peticiones de los agentes y los operarios municipales. "Nada, no hay manera, no quieren". Dos perros ladraban en los bajos del inmueble con las patas prácticamente bajo el agua. "No podemos hacer nada si no quieren", explicaba Jacinto. La alcaldesa, Esther Merino, explicó que "les hemos ofrecido alojamiento y no han querido, por lo que hemos hecho que la Guardia Civil certifique que les hemos ofrecido auxilio".
Miguel Izaguirre, otro vecino propietario de una cuadra con animales situada al lado de la vivienda (las dos infraestructuras más afectadas en las Navas) se quejaba amargamente de que "siempre que llueve mucho sucede lo mismo". "No te dejan cortar los árboles ni limpiar la orilla y yo estoy harto de ver cómo esto se inunda", decía señalando a su cuadra, en la que asegura tener 30 ovejas, dos caballos, 20 gallinas y los perros. No es la primera vez que se inunda su cuadra. "Hace un mes la riada me llevó un motor de agua que me costó 600 euros y ahora voy a entrar ahí y a sacar a los animales, a subirles a la zona alta". Sobre sus vecinos, afirma que no sabe por qué no quieren salir, pero esto sucede "siempre que llueve mucho".
Al parecer no es la primera vez que los residentes de esta vivienda sufren las inclemencias del tiempo y se niegan a salir del inmueble. Miguel, el vecino, no podía parar que quejarse. "Es que no me dejan hacer nada ni me dan ninguna solución", explicaba indignado. "Mira todos los árboles en el cauce y no para el agua y esta noche dicen que va a llover más".
Siempre Casar de Periedo
Además de Las Navas, en el municipio de Cabezón de la Sal volvió a
inundarse, como sucedió el pasado 27 de diciembre, la pedanía de Casar
de Periedo, donde las más afectadas fueron las viviendas situadas junto a
la estación de Renfe. Los vecinos observaban a media tarde cómo el agua entraba en sus bajos
desde los balcones de sus pisos. Entre ellos se encontraba Nieves
Gutiérrez, vecina de Casar, que sufrió, otra vez, las consecuencias de
las fuertes lluvias. "Es que lo que te entra es una impotencia muy
grande porque alguna solución tiene que haber para que no suceda esto".
También le entró el agua en diciembre. Esta vez calcula las pérdidas en
más de 3.500 euros "porque ayer trajimos 5.000 kilos de pienso que se ha
llevado el agua". A Nieves le dio tiempo a bajar a parte de sus vacas
al monte, a llevar a otras doce al corral de la casa, donde no había
tanta agua, y a dejar a las otras 35 dentro. "La estabulación es un río, pero hemos asegurado las arquetas para que las vacas no se caigan", explicaba ayer enfadada."Es la segunda vez que nos pasa en apenas un mes, porque siempre que llueve mucho las tuberías y los desagües no dan abasto y en los desagües se forman grandes remolinos. Te sientes muy impotente y me imagino que alguna solución tiene que haber, solo que no se lleva a cabo por unos y por otros", repetía. "Te da coraje y rabia que suceda tan seguido y que no puedas hacer nada. No se ha movido un dedo desde que pasó la última vez y el problema es que dentro de ocho días, si cae la misma agua, vamos a estar igual". La alcaldesa dijo también que aparte de la zona de la estación, se inundó la mies de Periedo, "donde la empresa de aguas ha estado trabajando desde primera hora para solucionarlo".
La portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, residente en Casar, Isabel Fernández, también informó de que en la zona del humilladero de Casar había mucha agua y que se habían inundado algunas viviendas de una urbanización de la pedanía.
Aparte de Casar de Periedo y Las Navas, la mies de Ontoria volvió a convertirse en un río, "sobre todo en la zona de Mimbrales, donde se juntan el río Rey y el río Saja, que se desbordan y lo inundan todo", dijo Merino. Por la Venta también ha bajado agua torrencial de Bustablado, "pero abrimos las arquetas y se solucionó, lo mismo que en Vistalegre, donde ha habido un momento en que se ha salido el agua por la tubería pero no se ha metido en viviendas", aclaró Merino.
Alfoz de Lloredo
Alfoz de Lloredo fue otro de los municipios que sufrió inundaciones. Mónica Lobeto, vecina de La Busta,
contaba en la tarde de ayer que "está bastante inundado todo en La
Busta, sobre todo la zona de la Iglesia y Bazuelo". Se desbordó un
pequeño riachuelo que va a la cueva del Linar, provocando las
inundaciones del entorno de la Iglesia.