La empresa de ferrocarriles, Deutsche Bahn (DB), se ha visto obligada a suspender para el resto de la jornada la circulación de los trenes de cercanías en el estado federado de Renania del Norte-Westfalia (oeste), mientras que las rutas de larga distancia se cubrien con mucha dificultad.
También en Baviera (sur), el tren de alta velocidad ICE dejó de circular entre las ciudades de Múnich y Augsburgo por los daños causados por el ciclón y se desconoce todavía cuándo quedará restablecido el tráfico ferroviario en esta ruta.
El aeropuerto de Fráncfort registró retrasos aislados debido al temporal, informó Fraport, empresa gestora del aeródromo.
Una de las tres pistas de despegue tuvo que cerrarse al tráfico por el fuerte viento, agregó.
También el tráfico marítimo desde el estado federado de Baja Sajonia a las islas de Frisia Oriental se han visto afectadas por el temporal, con retrasos en las salidas e incluso cancelaciones.
En tanto, la catedral de Hamburgo (norte) se vio obligada a cerrar sus puertas al público por las alertas emitidas por el DWD.
En las zonas próximas a la cordillera del Harz (norte) y a los Alpes (sur), el DWD ha emitido una alerta por tormentas extremas, ante el peligro de que el ciclón arranque árboles de raíz, lance objetos por los aires y cause daños importantes en edificios.
Las regiones más afectadas de momento son partes de Baden-Württemberg y Baviera (sur), Baja Sajonia, Renania del Norte-Wesfalia y Hesse (oeste), y Sajonia, Turingia y Sajonia-Anhalt (este).
El DMD registró hoy vientos extremos huracanados en las montañas Zugspitze, en Baviera (164 km/h; Feldberg, en la Selva Negra (151 km/h); y Weinbiet (148 km/h), mientras que en terreno llano estas ráfagas alcanzaron al menos los 118 km/h.
La fuerza de "Niklas" no es comparable, no obstante, a la de los ciclones "Wiebke" y "Vivian", que causaron devastadores daños a principios de los 90, ni al de "Christian", con ráfagas registradas el 28 de octubre de 2013 de hasta 172 km/h en la costa, señaló el meteorólogo Lars Kirchhübel, del DWD.
Está previsto que "Niklas" abandone mañana Alemania rumbo al Báltico, aunque persistirán las tormentas y no será hasta el viernes que las ráfagas pierdan fuerza de forma significativa y se puedan registrar incluso nevadas.
