También ha sido cortada la NA-122 en el puente de Cárcar (pk 32,5) por la crecida del río Ega.
La carretera N-113 ha sido cortada este mediodía en ambos sentidos en Castejón por desbordamiento del río Ebro, según informa la web del Gobierno foral. En concreto, la carretera se ha cortado entre los kilómetros 75 y 77.
Hasta las 14 horas de este martes, la Policía Foral y el Servicio de Conservación de carreteras han atendido una decena de incidencias relacionadas con las intensas lluvias registradas en las últimas horas. La más importante es el corte de la carretera que une Pamplona con Madrid (N-113) en Castejón (pk 75 y 77) por el desbordamiento del río Ebro.
Asimismo, también ha sido cortada la carretera que va de Estella a Cárcar (NA-122), en el puente de esta última localidad (pk 32,5), por la crecida del río Ega.
Además, la localidad de Andosilla está en situación de alerta por el aumento del caudal del río Ega, mientras que Estella, por el río Ega y Castejón y Mendavia, por la crecida del Ebro están en prealerta, según informa Gobierno de Navarra en su página web.
En Estella, el Ega alcanza los 2,84 metros de altura y los 106,72 metros cúbicos por segundo, y su tendencia es descendente, en cambio, en Andosilla este río llega a los 3,25 metros y 171,80 metros cúbicos por segundo y continúa subiendo.
Por su parte, el Ebro alcanza en Castejón los 6,07 metros de altura y 1.348 metros cúbicos por segundo, mientras que en Mendavia ha subido a 3,45 metros y 658 metros cúbicos por segundo.
Según indica la Confederación Hidrográfica del Ebro, en Castejón,
donde las motas están dañadas por la anterior crecida, está previsto
que el caudal del río siga subiendo, por lo que en las próximas horas
podría llegar a 1.500-1.900 metros cúbicos por segundo.
En cuanto al nivel de los ríos, se espera en las próximas horas una crecida del Ebro menor
a la registrada el mes pasado, pero que puede anegar zonas que ya
entonces se inundaron debido al deterioro que presentan las motas. La
punta se alcanzará en Castejón esta noche. El río Huecha también experimenta estos momentos una crecida a su paso por Cortes, que podría inundar campos de cultivo.
Por su parte, el caudal del río Ega ya ha comenzado a descender, así como el del Alhama, que se ha desbordado en Cintruénigo, Corella y Fitero, afectando a caminos rurales y casetas agrícolas, ha informado el Gobierno foral en una nota.