- Ambos habían salido horas antes a pescar pulpo en su barco, de 6,5 metros
Ambos habían salido a faenar del puerto de Laxe, como
solían hacer siempre, en torno a las ocho y media de la mañana. Lo
hacían a bordo de una pequeña embarcación de 6,50 metros de eslora, de
nombre Alba. Se dirigieron a una zona situada entre Laxe y Soesto
denominada O Morelo. Los tripulantes fueron vistos con vida por última
vez por los marineros de otra embarcación que pasaba por la zona poco
tiempo después de salir de la dársena. Iban a pescar pulpo.
Fue una patrulla de la Guardia Civil del puesto de
Laxe la que dio el aviso al Servicio Galego de Emerxencias 112. Los
agentes realizaban la ronda y encontraron por casualidad el cadáver de
un hombre en la arena. Eran las 11.15 horas. Hasta el lugar se
desplazaron de inmediato miembros del Grupo de Emerxencias
Supramunicipal (GES) de Ponteceso, Policía Local, Cruz Roja y Protección
Civil de Laxe, así como personal de la cofradía. Era el cuerpo sin vida
de Evaristo Barcia Toja.
Unos 45 minutos después del primer aviso, los equipos de rescate
desplazados al lugar localizaron en el mar un segundo cadáver.
Intentaron alertar al helicóptero de Salvamento Marítimo, pero el riesgo
de que el cuerpo fuera arrastrado mar adentro hizo que un integrante
del cabildo de Laxe, Modesto Domínguez Castro, en colaboración con otras
personas, lograse atar el cadáver y traerlo a tierra. Era el de José
Ramón Martínez Sánchez.
Identificación
Los equipos de emergencias alertaron a los familiares
de los dos fallecidos. Se vivieron momentos muy delicados y muy duros
cuando tuvieron que identificar los cuerpos.
Un forense llegó al arenal de Soesto sobre la una de
la tarde y una hora después ordenó el levantamiento de los cadáveres y
su posterior traslado a un tanatorio de la localidad, donde quedó
instalada la capilla ardiente.
Según las hipótesis de algunos marineros presentes en
Soesto, la causa más probable de la muerte de los dos marineros fue un
golpe de mar, aunque no se descarta tampoco la posibilidad de que
sufriese una vía de agua. Al cierre de la edición, todavía no habían
sido localizados los restos de la embarcación siniestrada.
Fuerte viento del norte
Ayer soplaba viento fuerte de componente norte, que variaba a nordeste. Lo que los marineros llaman nortazo.
Con estas condiciones, según los profesionales, es difícil trabajar.
Había fuerte marejada y mar de fondo. Aun así, la flota salió a faenar,
pese a que la gran mayoría regresó a puerto al tener conocimiento de la
trágica noticia.