El concejal de Mantenimiento y Obras de Infraestructuras,
Manuel Arrieta, explicó que esta alarmante brecha «se produjo porque el
agua penetró por una grieta entre los botalolas y el alzado del propio
Muro. El oleaje hizo presión y se metió por debajo del paseo levantando
la solera de hormigón». Arrieta confirmó que en los próximos días
operarios de Tragsa picarán el paño en la zona afectada para conocer si
la mar se llevó el relleno de esa solera.
Al margen de la grieta, Felgueroso hizo ayer un primer
recuento de los destrozos en el Muro del oleaje que azotó la bahía
gijonesa el pasado lunes y la madrugada del martes. El portavoz de la
junta de gobierno explicó que las sacudidas del temporal arrancaron 90
metros de botaolas y movieron otros tantos. También se vieron afectados
25 metros cuadrados de barandilla, 450 metros cuadrados de pavimento de
hormigón, 100 de pavimento de granito y 26 de pavimento calizo en
rampas. A ello hay que sumar también 16 metros de canaleta con rejillas,
13 metros de peldaños de escalera, 11 metros de pasamanos, 6 unidades
de bases de farolas, 2 papeleras, 2 fuentes, un banco y una banderola.
Estos daños a mayores en el Muro serán asumidos por la
Demarcación de Costas en Asturias, según le confirmó ayer en
conversación telefónica el propio jefe de este organismo estatal, Ramón
Galán, al concejal Manuel Arrieta. La semana pasada, con motivo de la
visita a Gijón del subsecretario del ministerio de Agricultura,
Alimentación y Medio Ambiente, Jaime Haddad, el Ayuntamiento tuvo
conocimiento de que la Administración del Estado iba a invertir 320.000
euros para subsanar los desperfectos en primera línea de playa. A falta
de concretar la valoración económica de los últimos estropicios, esa
cantidad se podría multiplicar ahora por tres a tenor de la importancia
de los desperfectos.
Galán también trasladó al concejal de Mantenimiento y Obras
de Infraestructuras gijonés su convencimiento de que las reparaciones
en el paseo del Muro podrán estar concluidas antes del verano si los
temporales en el Cantábrico conceden por fin una tregua.
Operarios de Tragsa, la empresa que trabaja para Costas,
acometieron ayer obras de urgencia en los boquetes y socavones que abrió
el oleaje a ras de playa entre las escaleras 3 y 4 para proteger la
estabilidad del Muro y salvaguardar el aparcamiento del Náutico.