La Guardia Civil ha rescatado este lunes por la tarde en Sierra Nevada
a dos montañeros madrileños de 35 años que se habían quedado enriscados
en la cara norte del Mulhacén, en uno de los rescates más difíciles
realizados por los agentes de la Sección de Rescate e Intervención en
Montaña (Sereim) durante esta temporada invernal en el macizo montañoso
granadino.
La noticia de que ambos montañeros necesitaban auxilio
llegó a la Guardia Civil a través del guarda del refugio Poqueira de
Sierra Nevada a las 23,00 horas del pasado domingo. Este informó de que
dos montañeros habían salido esa mañana con la intención de escalar la
cara norte del Mulhacén, que tenían previsto regresar a media tarde y
aún no lo habían hecho.
La Guardia Civil se puso en contacto telefónico con los
alpinistas y ellos informaron de que se habían equivocado en el
itinerario de ascenso mientras escalaban y se habían quedado enriscados
en una cota a 3.325 metros, y como aún les quedaba un tramo bastante
importante de pared hasta la cima y se les había hecho de noche, iban a
quedarse anclados en una repisa y allí la pasarían hasta que la Guardia
Civil pudiera rescatarlos.
En cuanto amaneció el lunes, dos guardias civiles del Sereim acudieron a la zona en el helicóptero de la Guardia Civil de Granada.
Tras un vuelo de reconocimiento sobre la cara norte, localizaron a
ambos montañeros en una zona de piedra, hielo y nieve, en las
inmediaciones del canal central, y comprobaron que se encuentran en una
situación segura puesto que estaban anclados y sobre una pequeña repisa.
Los pilotos del helicóptero intentaron aproximarse hasta
ambos montañeros en varias ocasiones, pero tuvieron que desistir de la
maniobra porque sobrepasaron los límites que permite el aparato. Se optó
entonces por aterrizar en una posición superior a la de los montañeros y
allí los guardias civiles especialistas en montaña instalaron unos 120
metros de cuerda para descender hasta donde se encontraban.