Un equipo de especialistas en buceo de los GEO de la Policía Nacional (Grupo Especial de Operaciones) se suma desde este miércoles a la búsqueda de Víctor da Silva, el joven de origen brasileño residente en Zaragoza que desapareció en la capital aragonesa la pasada Nochevieja, tras asistir con sus amigos a una fiesta de fin de año.
Bomberos y policía llevan más de dos semanas rastreando los
ríos Ebro y Huerva en busca del cadáver de este joven, al que se da por
muerto. Las investigaciones fueron iniciadas por el grupo de homicidios
de la Jefatura Superior de Policía de Aragón, sin que hasta el momento
hayan trascendido conclusiones sobre lo que le pudo haber ocurrido al
muchacho.
Hasta la fecha no se ha descartado ninguna hipótesis,
incluida que el joven, de 19 años, fuera víctima de un crimen. Por lo
que sí apuestan los investigadores es por que su cuerpo acabó en las
aguas del Ebro o del Gállego, que discurren por Zaragoza.
Hasta ahora las búsquedas no han dado resultados. Se ha
buscado en las aguas y también por aire, tanto con un «dron» (pequeño
avión no tripulado dotado de cámara) como con un helicóptero, que
permanecerá sobrevolando diversas zonas de Zaragoza y de su entorno.
Además se siguen realizando rastreos a pie.
Ahora se intensificará la búsqueda subacuática, para lo que
se incorporan estos equos de los GEO procedentes desde su base de
Guadalajara.
