El temporal que estos días ha dejado rachas de viento de hasta 100 km/h y olas de 9 metros de altura en
la cornisa cantábrica amainará en los próximos días, pero el mal tiempo
se prolongará en el tercio norte peninsular durante el resto de la
semana con persistentes lluvias y nieve en cotas bajas.
En áreas del Cantábrico, Castilla y León, Navarra, La Rioja y Aragón habrá precipitaciones
durante toda la semana, que podrán ser en forma de nieve en cotas
cercanas a los 600/800 metros, ha explicado a Efe el meteorólogo José
Antonio Maldonado. «Esto significa que no sólo va a nevar en zonas de
montaña, sino también en capitales de la meseta castellana como Soria o
Burgos y zonas del Alto Ebro», ha remarcado.
Además, el meteorólogo ha advertido de que «llueve sobre
mojado», lo que podría aumentar los efectos de las lluvias, que no serán
intensas pero sí persistentes.
Pese a que el temporal va perdiendo intensidad, la entrada
de varios frentes atlánticos, menos activos, que afectarán a la zona
norte, provocará vientos moderados de componente oeste/suroeste de hasta 50/60 km/h, menos intensos que los de los días pasados.
Los fenómenos costeros adversos que han afectado al litoral
cantábrico los primeros días de la semana tendrán menor incidencia el
resto de la semana, ha indicado Maldonado, quien ha señalado que las fuertes olas de 7 u 8 metros rebajaran su altura.
Mañana continúan en alerta 26 provincias españolas de 11
comunidades autónomas por fenómenos costeros adversos, lluvia, nevadas y
viento.
No obstante, la Aemet sólo ha activado alertas amarillas
(con excepción de Gerona, alerta naranja por fenómenos costeros), con la
que no existe riesgo meteorológico para la población en general, aunque
sí para alguna actividad concreta.
A 18 grados en el Mediterráneo
En cuanto a las temperaturas, el meteorólogo ha señalado
que las máximas en el sur y el área del Mediterráneo podrán situarse en
torno a los 18 grados centígrados durante toda la semana, mientras que en Madrid y en el área del Cantábrico rondarán los 10 grados y en Castilla y León no superarán los 6 grados.
Las temperaturas bajarán en general, pero el viento de
componente suroeste que soplará en la zona cantábrica hará que la bajada
del termómetro en el norte no sea tan acusada, ha explicado.
Según Maldonado, el mal tiempo con el que se despide el mes
«es propio una situación de tránsito entre enero y febrero y está
dentro de los cánones».