Los bomberos de Vigo siguieron apagando rescoldos en la nave de Freiremar durante la noche para evitar que se reprodujese el fuego. Un retén permanece en el lugar para impedir cualquier incidencia. La instalación sufrió graves daños en su estructura por el pavoroso incendió desencadenado a las 12.20 horas de ayer en el número 83 de Jacinto Benavente. La nave había pertenecido a Freiremar pero su actual concesionaria, Frigalsa, la iba a abrir en septiembre como almacén frigorífico de atún. Los obreros trabajaban en la reforma cuando una chispa de soldadura saltó y se propagó a todo el edificio. El incendio levantó una enorme nube de humo visible desde toda la ciudad y la ría.
