El fuego, que ya ha sido controlado, se inició detrás de la capilla
de Sant Blai, obligó a desalojar a una mujer con dificultades de
movilidad y calcinó 20 hectáreas de matorral.
Un incendio al parecer provocado por una posible negligencia causó ayer
la alarma entre los vecinos de Pedreguer debido a que las llamas
llegaron a escasos metros del casco urbano de este municipio.
De hecho, debido a la gran cantidad de humo existente, se procedió a
desalojar a una mujer con problemas para caminar y se alertó a los
residentes en los 20 chalés cercanos de que estuviesen preparados ante
una posible evacuación, que al final no se produjo. Esto creó cierta
confusión porque en un primer momento se creyó que los residentes en
esas veinte casas también habían sido desalojados, pero no fue así.
El fuego, que ya ha sido controlado, comenzó sobre las 15.25 horas
en una zona pegada a la capilla de Sant Blai, conocida por todos como
'la capella' justo detrás donde está la 'creueta de la llagosta'. Un
lugar muy cercano al pueblo donde, según comentó el alcalde, Sergi
Ferrús, suele acudir la gente a conversar y fumarse algún que otro
cigarro. Por este motivo, ayer se barajaba la hipótesis de que hubiese
sido provocado debido a una negligencia.
Desde allí, y avivadas por el fuerte viento que soplaba a esas
horas, las llamas se propagaron rápidamente hacia la 'Montaña Gran' y la
entidad local menor de la Llosa de Camatxo.