La borrasca de ayer vino acompañada de aire frío, que
dejó copiosas nevadas en las montañas de Lugo y Ourense y en otros
puntos de las provincias. Hubo complicaciones en la circulación de
vehículos por las carreteras lucenses, y no solo las de la montaña. La
cota de nieve bajó al mediodía, e incluso estuvo nevando
intermitentemente en Lugo capital, donde a las 14.30 horas se registraba
una temperatura de cero grados.
Hubo que tener precaución en A Fonsagrada, en
este caso en el alto do Acebo, en la LU-701, en el límite con Asturias.
También cerca, pero ya en la comunidad vecina hubo que usar las cadenas
en el alto de Penafonte, cerca de Grandas de Salime. Donde hubo
importantes dificultades para transitar fue en la LU-633, en los 20
kilómetros entre Pedrafita y Triacastela. Puntos como O Cebreiro se
llenaron de visitantes, algunos con aparatos más propios de las
estaciones de esquí.