La situación en la cuenca del Duero
se mantiene este domingo sigue en el nivel de alerta generalizada, con
15 estaciones de aforo bajo dicho aviso, mientras que en el río Carrión a
su paso por Villoldo (Palencia) se ha elevado al de alarma, según los
datos facilitados por la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD).
Las crecidas del día de ayer en el Esla y sus afluentes,
Órbigo, Tera y Cea se van trasladando a los tramos medios y bajos de ese
sistema, de manera que el alto caudal del Cea que entró en alarma en la tarde-noche pasada en Sahagún (León) se notará a lo largo del día de hoy en su curso medio y bajo.
Por su parte el propio Esla en el área de Benavente
(Zamora) en la confluencia con el Tera, Órbigo y Cea proseguirá este
domingo con altos caudales que se trasladará a tierras zamoranas la
punta con que ayer discurría en la provincia de León.
Otro tanto sucederá con los caudales del Carrión
cuya crecida de esta noche se desplazará paulatinamente hacia Palencia.
Por lo que se refiere al Pisuerga, notará la crecida de sus afluentes
en su cuenca baja en los próximos dos días en los que puede rozar la
alerta, aunque no se espera que llegue a una situación de alarma. El
Duero a su paso por Toro (Zamora) y Zamora proseguirá con caudales
importantes, pero sin llegar a situaciones preocupantes.
Embalses
En cuanto a los embalses, éstos mantienen un «magnífico
comportamiento» en la laminación de las crecidas de cabecera, pese a que
su volumen embalsado ha subido ligeramente hasta el 83,5 por ciento.
Así, siguen soltando de forma controlada un caudal moderado las presas
de la Confederación. Sólo vierten por coronación los embalses del río
Águeda y del Tormes en la provincia de Salamanca, así como el de
Arlanzón que vierte a Úzquiza en Burgos y el del Pontón Alto de Segovia.
Los embalses hidroeléctricos del Esla y del Duero en
Zamora, así como los fronterizos del Duero en Salamanca siguen vertiendo
por coronación. En resumen, la CHD considera necesario «seguir con atención» la evolución
de los puntos conflictivos, aunque es presumible, no obstante, que la
evolución meteorológica hacia situaciones menos adversas permita una
«tregua» en las cabeceras y cursos medios en los próximos días.