Los accesos a Málaga desde Guadalmar volvieron a sufrir ayer las consecuencias de las lluvias torrenciales, evidenciando por enésima vez los problemas de desagüe que existen en la zona. La acumulación de agua en la calzada terminó por impedir la circulación rodada desde que empezaron las lluvias. Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), en menos de dos horas se recogieron en el aeropuerto 50 litros por metros cuadrado, lo que provocó que los colectores se saturaran.
La tromba terminó anegando la antigua N-340, convirtiendo en un caos la avenida de Velázquez, el acceso al aeropuerto por Comandante García Maroto, el acceso a Churriana, la zona de Plaza Mayor e Ikea y la carretera de Cártama. La situación obligó a cortar la entrada al aeródromo por la MA-21, dejando a cientos de conductores inmovilizados durante gran parte de la mañana. Por suerte está operativo el Acceso Sur, desde Guadalmar, que al estar elevado sobre pilares no resultó afectado.
Según el presidente de la Asociación de Polígonos Industriales de Málaga (Apoma), Sergio Cuberos, las lluvias provocaron decenas de incidencias en polígonos domo Villa Rosa, Guadalhorce y El Viso, anegando calles y naves y obligando a rescatar a varios vehículos. «No puede ser que cada vez que caen cuatro gotas, porque no llovió ninguna barbaridad, las empresas de los polígonos industriales tengamos que quedarnos inmovilizados y toda la zona se colapse», se quejó Cuberos, que culpó de la situación a la falta de limpieza de los arroyos. «La suciedad tapona los colectores, que terminan desbordándose e inundando los polígonos», señaló.
Problemas en el aeropuerto
En la misma línea que el representante de los empresarios, la portavoz socialista en el Ayuntamiento, María Gámez, denunció la falta de mantenimiento por parte del equipo de gobierno ante las acumulaciones de agua en varios puntos de la ciudad y los vertidos de aguas fecales en las playas. Gámez anunció que solicitarán al equipo de gobierno una actuación urgente en la mejora del alcantarillado en la ciudad.
La tromba afectó de lleno al aeródromo malagueño y en especial a la terminal T-3, que sufrió graves goteras en la zona de facturación, en el control de seguridad; y en algunos comercios y oficinas de operativa aeroportuaria, que tuvieron que permanecer cerrados. Las goteras en la terminal principal obligaron a Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) a trasladar el filtro de seguridad a la T-2, durante unas dos horas. La razón de esta escena fue que las fuertes lluvias pillaron al aeródromo en plenas obras de impermeabilización de la cubierta –precisamente, para eliminar el problema de filtraciones– y que se adjudicaron en marzo por un importe de 924.522 euros. Según fuentes de Aena, los trabajos comenzaron en mayo, con un plazo de cinco meses. Aunque unos 40 trabajadores de limpieza se dedicaron casi por completo a achicar agua de la terminal, la situación no logró normalizarse hasta pasadas las 14.00 horas.
En paralelo, un total de 13 vuelos –uno nacional y el resto internacionales– que tenían previsto aterrizar en Málaga tuvieron que ser desviados a los aeropuertos de Sevilla, Granada y Madrid-Barajas debido a la escasa visibilidad producida por la tromba de agua registrada en la capital. De esos 13 aviones que tenían que tomar tierra en Málaga, 10 lo hicieron finalmente en Sevilla, dos en Granada y otro en Madrid. Los vuelos desviados procedían de East Midlands, Glasgow, Zurich, Nueva York, Ginebra, Bolonia, París, Edimburgo y Londres. También sufrieron retrasos de unas dos horas numerosas salidas.
Jornada histórica
Según el servicio de Emergencias 112, en Málaga se registraron más de 80 incidencias, la mayoría de ellas en la zona de Alhaurín de la Torre, Torremolinos y la Axarquía, aunque en ningún caso hubo que lamentar daños personales. Sólo el Consorcio Provincial de Bomberos tuvo que atender más de 20 incidencias.
Los aguaceros, que obligaron a activar el aviso naranja, se cebaron con la zona oriental. Así, en Frigiliana dejaron 70 litros acumulados, y más de 80 litros en puntos de la comarca de la Axarquía, según el director de Aemet en Málaga, José María Sánchez-Laulhé. Además, en Ojén cayeron 45 litros en una hora y hasta 80 acumulados.
El 7 de septiembre es ya el día más lluvioso del año 2015 en Málaga, donde la Agencia Estatal de Meteorología toma como referencia provincial histórica lo recogido por el pluviómetro del aeropuerto. Según este dato, las fuertes tormentas han dejado 50 litros por metro cuadrado en esta infraestructura.
Esa medida significa no solo que es día más húmedo de este año, que ha sido muy seco, sino que en una sola jornada ya ha caído el doble de la media histórica mensual, que en septiembre es de 20,2. Con todo, no se pueden perder de vista los 316,5 litros del año 1957, que es el récord. El año pasado también fue un mes lluvioso, con 43,2 litros. El más abundante de este siglo fue 2001, con 101 litros. Hoy se prevén solo algunas precipitaciones débiles y puntuales, y no se espera más para los próximos días, por lo que, de hecho, se volverá a una situación de verano, con máximas de momento de 27-28 grados y posible terral suave, y hasta 30 grados durante el fin de semana.
A nivel provincial, en la comarca oriental se registraron inundaciones en bajos, sótanos y garajes en Benamocarra, Torre del Mar, Algarrobo, Frigiliana y Cómpeta, que durante parte de la mañana quedó incomunicada por desprendimientos en la carretera A-7206 y en la A-7207 por un camión que quedó bloqueado en la calzada. En Algarrobo, un vehículo fue arrastrado por la corriente cuando intentaba cruzar el cauce.
En Alhaurín de la Torre, el Ayuntamiento tuvo que movilizar a todos los servicios municipales para atender las numerosas incidencias. El agua entró en algunas casas, sobre todo en la zona de Capellanía y El Peñón, así como en instalaciones municipales, mientras que también se registraron la caída de un muro en Altos de Viñagrande y algunos desprendimientos de terraplenes, que obligando a cortar una calle en Pinos de Alhaurín. Además, se recibieron alertas desde algunos colegios como Isaac Peral y Algazara, que también fueron atendidas.