Al menos una persona falleció y otras
tres resultaron heridas ayer en Oldenburg (noroeste de Alemania) al
estrellarse la avioneta en la que volaban poco después de que despegase.
El accidente se produjo hacia la una y media de la tarde (hora
local), cuando el aparato, un Cessna 172, cayó junto a un aparcamiento
de la autopista A-28. Se desconocen las causas que provocaron el
siniestro y se ha abierto una investigación para aclararlas.
La
parte delantera de la avioneta quedó totalmente destrozada por el
impacto contra el asfalto y el aparato cayó posteriormente por un
pequeño talud.
Al lugar del siniestro se desplazaron varios
equipos de Bomberos, agentes de la Policía y ambulancias, que
trasladaron a los heridos -dos de ellos graves- hasta un hospital
cercano.
También se movilizaron varios helicópteros de rescate y
la Policía decidió cortar temporalmente la autopista A-28 por temor a
una explosión, que finalmente no se produjo. Pero esa medida de
precaución provocó importantes retenciones en la zona.
Según la
edición on-line del diario alemán "Bild", la avioneta acababa de
despegar del aeródromo Oldenburg-Hatten y el piloto era un experimentado
miembro de un club local de aviación. El accidente podría haber tenido
peores consecuencias si se hubiese producido un día laborable, por el
intenso tráfico.
También se produjo otro accidente de
avioneta en Oschatz, Sajonia, cuyo piloto, de 66 años, resultó herido
muy grave al dar el aparato varias vueltas de campana tras caer al suelo
por causas que se desconocen.