La nieve y las inundaciones dificultaron la circulación en las carreteras. En la provincia de Lugo en la A-6 estuvo parado el tráfico en varias ocasiones en Pedrafita y en O Cereixal a lo largo de la tarde, mientras trabajaban las máquinas quitanieves, que no pararon de realizar pasadas en toda la jornada para tratar de mantener. Tráfico limitó la circulación de vehículos pesados por temor a que hicieran la tijera. La mayor parte de los vehículos tuvieron que parar hasta que pasó la quitanieves porque prácticamente ninguno llevaba cadenas. En la red de carreteras secundarias la única en la que era necesario el uso de cadenas durante el día fue la LU-633, entre Pedrafita y Sarria, en el alto de O Poio. En la N-VI está cortado el tráfico entre los kilómetros 524 y 526, a la altura de Pacios por inundaciones en la carretera.
El temporal tuvo especial incidencia en Camariñas,
donde un rayo provocó el caos en el casco urbano a primera hora de la
tarde. El relámpago cayó sobre un edificio de cuatro plantas y una
vivienda unifamiliar además de dañar un poste de la luz. También provocó
daños en uno de los tejados y destrozó una chimenea. Esta chispa causó
también cortes de luz, daños irreparables en numerosos aparatos
eléctricos e Internet dejó de funcionar durante varias horas. Por otra
parte, el viento alcanzó ayer rachas de 86 kilómetros por hora en
Malpica y 85,7 en Camariñas.
En A Coruña, el fuerte viento levantó varias chapas
metálicas de la estructura del sistema de descargas del muelle del
Centenario Norte. Además, el intenso frío en las cotas más altas
convirtió algunas carreteras del área metropolitana en auténticas pistas
de patinaje. Sobre las once de la mañana se produjo un accidente de
tráfico en la N-634, a su paso por Curtis, en el que se vieron
involucrados tres automóviles y un camión. El resultado fue de seis
personas heridas, una de ellas de pronóstico grave. El temporal de
viento y mar también obligó a un buque tanque a fondear en la ría de
Ares a la espera de que mejoraran las condiciones para poder atracar en
los pantalanes de Repsol Petróleo, en A Coruña.
En Ortigueira también hubo que lamentar incidentes en
varias carreteras, y una salida de vía provocada por la granizada que
dejó un herido leve.