Las autoridades de la principal isla de Hawai declararon el estado de
emergencia debido a que el flujo de lava del volcán Kilauea amenaza con
destruir zonas residenciales, cuyo desalojo podría ser inminente,
informaron este viernes las autoridades.
El alcalde de Hawai,
Billy Kenoi, suscribió la decisión el jueves luego de que el flujo
incandescente del Kilauea avanzó a menos de un kilómetro de distancia de
una zona residencial.
"Estamos tomando esta medida para asegurar
que la población pueda preparar a sus familias, mascotas y pertenencias
para una evacuación segura y ordenada", dijo Kenoi.
La
declaratoria de emergencia permite a las autoridades restringir la
circulación de los no residentes en la isla y facilitar que la población
local sea evacuada rápidamente en caso de ser necesario, afirmó el jefe
de la Defensa Civil de Hawai, Darryl Oliveira.
Ninguna desalojo
ha sido ordenado todavía, pero las autoridades han pedido a los
pobladores "completar sus planes de evacuación y monitorear los reportes
de la Defensa Civil en los próximos días", señaló un comunicado de la
alcaldía.
Según el diario Honolulu Star, el flujo de lava podría alcanzar varias casas posiblemente en una semana.
La
isla de Hawai o Isla Grande es la más extensa de las ocho de este
archipiélago del Pacífico, que tiene varios volcanes activos.