La búsqueda del vecino de Oliete (Teruel) desaparecido desde el pasado sábado vuelve a centrarse este miércoles en el mismo tramo ya rastreado del río Seco,
entre esta población y Ariño, y se prevé que se incorpore más
maquinaria pesada y una segunda unidad canina perteneciente a
voluntarios de Protección Civil.
Fuentes del Gobierno de Aragón han apuntado que el operativo considera que el hombre podría estar enterrado entre las montañas de lodo
generadas por la riada del pasado sábado por lo que se van a incorporar
más excavadoras para remover los montones acumulados y que los perros
puedan olfatear.
En la búsqueda participan los bomberos de las diputaciones provinciales
de Teruel y Zaragoza, que cuentan con especialistas en actividades
subacuáticas, así como miembros de los Grupos Especiales de Actividades
Subacuáticas (Geas) de la Guardia Civil y la unidad canina del instituto
armado.
A los que este miércoles se sumarán, previsiblemente, los perros del servicio de voluntarios de Protección Civil de Zaragoza.
El operativo de búsqueda rastreará así la misma zona en la que han trabaja durante tres días,
y este martes aproximadamente hasta las 20.00, cubriendo una distancia
de unos 16 kilómetros aguas abajo del lugar donde desapareció este
vecino de 48 años.
Por otra parte, la oficina de información a los afectados por las riadas ha abierto este martes sus puertas
en el Ayuntamiento de Oliete, atendida por funcionarios del Gobierno de
Aragón y coordinada por el director general de Ordenación del
Territorio, Javier Gamón.
En la misma se orientará a los afectados de todos los municipios sobre los trámites que deben realizar para solicitar las ayudas oportunas, según ha informado el Ejecutivo aragonés.
También este martes el consejero de Hacienda, José Luis Saz, ha
presidido la reunión de coordinación interinstitucional celebrada en el
Ayuntamiento de Oliete y en la que han participado representantes de
distintos departamentos del Gobierno de Aragón y del resto de
instituciones implicadas en la emergencia.
En ella, los alcaldes han dado cuenta de los daños materiales que se produjeron en cada uno de sus municipios el
pasado sábado, cuando las tormentas que descargaron en el norte de la
provincia de Teruel provocaron el desbordamiento de los ríos Seco y
Martín.