El gobernador de Idaho, Butch Otter, sobrevoló en helicóptero las zonas afectadas por los incendios que, tan solo en las cercanías de Sun Valley, han obligado a la evacuación de unas 1,600 familias.
Según las autoridades, un incendio en el área de Beaver Creek, iniciado por un rayo hace más de una semana, ha consumido ya más de 24,300 hectáreas y hasta ahora sólo han podido contenerlo en un seis por ciento.
Otro incendio, en el área de Elk Complex ha causado daños en más de 50,625 hectáreas, aunque ya ha sido controlado en un 50 por ciento.
Según Otter, la serie de incendios se debe a un aumento de las temperaturas veraniegas, tras un invierno con escasas con menos precipitaciones de lo normal.
La principal prioridad de las autoridades es aplacar el incendio en Beaver Creek, dada su proximidad a zonas residenciales en las localidades de Haley y Ketchum.
Según el diario Idaho Statesman, los incendios de la temporada son, en su conjunto, mayores que el que arrasó la zona de Yellowstone en 1988, alimentado, al igual que los de ahora, por fuertes vientos y la sequedad del ambiente.
En 13 de los últimos 25 años, los incendios forestales han dañado más de dos millones de hectáreas en Estados Unidos, agregó el diario.