Fue ayer a las dos y media de la tarde en una zona de despachos de la cuarta planta en la que no había personal en esos momentos
Un trozo del techo del pasillo de la zona de Consultas Externas de la cuarta planta del Hospital Infanta Cristina de Badajoz se derrumbó ayer. No hubo heridos porque la zona estaba desocupada en ese momento, según informó ayer la Junta de Extremadura mediante un comunicado.En su nota de prensa detallan que se derrumbó un tramo de unos diez metros cuadrados del falso techo de escayola.
Fue a las 14.30 horas en una zona donde no hay consultas, por lo que en el momento del desplome no había nadie. La planta en cuestión está destinada a despachos y sesiones clínicas.
Antecedentes
No es la primera vez que hay un susto de este tipo en una instalación
sanitaria. Recientemente se han dado dos casos. En julio fue el techo
de Oftalmología del hospital Nuestra Señora de la Montaña de Cáceres y
en agosto el de la sala de monitorización del servicio de partos del
Hospital Ciudad de Coria.Tras el incidente en Cáceres el Servicio Extremeño de Salud (SES) abrió una investigación para valorar el estado de las instalaciones, que admitió que estaban obsoletas. En el Nuestra Señora de la Montaña, al igual que en Badajoz, el caso tuvo lugar en un despacho cuando estaba vacío por lo que tampoco hubo heridos.
La principal consecuencia en la capital cacereña fue el cierre de la consulta de Oftalmología que sufrió el derrumbe además de la investigación, para la que se ha realizado un informe técnico sobre el estado de este centro sanitario que está bastante deteriorado.
En Coria tampoco hubo heridos, pero fue gracias a que detectaron el problema antes de que el techo se desplomase. La sala de monitorización del servicio de partos suele estar ocupada, pero a primera hora de la mañana detectaron grietas y abombamientos en el techo, por lo que decidieron trasladar el servicio y clausuraron la zona de forma provisional.
Poco después la escayola se vino abajo. Como medida de precaución, en este caso, se apuntalaron y revisaron los techos colindantes de la zona, aunque no se apreció deterioro. Tras este segundo suceso hubo numerosas críticas que apuntaron a la falta de inversiones como la causa del deterioro de las infraestructuras hospitalarias.