La intervención de la embajada española agilizó ayer su traslado a un
hotel tras día y medio perdido sin atención en el aeropuerto.
Los 42 ourensanos que desde el miércoles permanecen
retenidos en Estambul, al no haber podido salir su avión como
consecuencia de la nevada en la capital, han podido instalarse el jueves
a primera hora de la noche en un hotel alejado del centro urbano y del
aeropuerto. Las maletas aún no las habían recuperado al cierre de esta
información. Los ourensanos han sufrido, aparte de otras incomodidades,
el inconveniente añadido de que en la farmacia del aeropuerto no les
quisieron dispensar medicinas que exigen receta médica. Y ello a pesar
de que en el grupo de ourensanos hay tres profesionales de la sanidad, a
quienes, pese a mostrar su carné profesional, les han dicho que allí no
tiene validez, una situación que ha sorprendido a la pediatra Berta
Collarte y a sus dos compañeros médicos.
La inesperada situación ha obligado al grupo, a la
espera de las maletas, a compartir medicamentos y a revisar las pautas
de personas sometidas a tratamientos relacionados con tiroides,
ansiolíticos o hipertensión.
Después de haber pasado el miércoles en el aeropuerto
y sin haber podido contactar con la embajada española, ayer fueron
recibir atención tanto de la empresa Atlas, con la que habían organizado
el viaje, como de la embajada y de las Turkish Airlines. A mediodía
hora española (13 horas en Estambul) los 42 ourensanos subieron a un
autobús que había puesto a su disposición la agencia de viajes. Unas
horas después, los repartieron en otros dos más pequeños, siendo las
líneas aéreas turcas las que se habían cargo de ellos. Trasladados a un
hotel, ya por la noche, esperaban que les fueran entregadas las maletas y
objetos de aseo antes de cena. Durante el día, según dicen los
afectados, solo les dieron té y agua.
Con la mediación de la embajada española, que ayer
veían acertada y correcta (contrariamente a lo ocurrido el miércoles,
día en el que no lograron contactar), esperan regresar el sábado de
madrugada con destino a Santiago. Parte del grupo llegará por Madrid; el
resto, por Bilbao, como tenían previsto. Muy alejados y con nieve, el
plan es descansar.