Un hombre de unos 50 años perdió la vida en la ciudad británica de Watford cuando un árbol aplastó su coche. En Hever perdió la vida una joven de 17 años que dormía en una caravana que fue alcanzada también por un árbol derribado. Las primeras informaciones apuntaban a que se encontraba en una casa cuando murió.
En Holanda, una mujer perdió la vida en Amsterdam tras ser golpeada por un árbol que cayó justo cuando pasaba por debajo, y un hombre murió aplastado por otro árbol cuando se encontraba dentro de su automóvil a las afueras de la ciudad, confirmaron los servicios de emergencias a varios medios holandeses.
La tormenta provocó fuertes inconvenientes en el tráfico aéreo y por carretera en el sur de Reino Unido, y paralizó casi por completo el transporte por ferrocarril. Entre otras, se vio afectada la conexión ferroviaria con Francia a través del Canal de la Mancha, así como partes del trazado del metro de Londres que transcurren al descubierto.
En el aeropuerto londinense de Heatrhrow, el mayor de Europa, se cancelaron 130 vuelos, según informó un portavoz. También se vieron afectados los aeropuertos de Gatwick, Stansted, Luton y otros del sur del país.
Los vientos de hasta 160 kilómetros por hora dejaron sin electridad a 220.000 hogares británicos, mientras que en el oeste de Francia unas 75.000 viviendas sufrieron cortes en el suministro.
