José Sánchez Carrasco, de 38 años, falleció el lunes pasado
a las puertas del Hospital General de Guaymas –en Sonora, México– tras
permanecer sin atención médica durante cinco días. Los servicios sanitarios le atendieron a su llegada, pero se negaron a continuar con la hospitalización puesto que José, jornalero de profesión, no disponía del dinero necesario para su tratamiento.
El hombre acudió al hospital con signos severos de deshidratación y malestar generalizado. Su estado le impidió regresar a su hogar y decidió permanecer a las afueras del centro médico,
donde murió cinco días más tarde. Medios de comunicación mexicanos
informan de que eran los propios pacientes que acudían al hospital los
que avisaron al centro de Desarrollo Integral de la Familia de Guaymas
de la situación en la que se encontraba José y grabaron su testimonio en vídeo.
Alfredo Cervantes Alcaraz –director del hospital implicado–
declaró en una entrevista a medios locales que el fallecido sí fue
atendido por los médicos correspondientes, pero que no se procedió a su hospitalización puesto que no estaba en posesión de seguro médico y no tenía dinero.
No es un caso aislado
No es un caso aislado
Hace pocos días, la fotografía de una mujer dando a luz en el jardín de un centro de salud dio la vuelta al mundo. La imagen fue publicada por Eloy Pacheco López, que a través de Facebook hizo circular la instantánea de la mujer y su bebé tirado en el césped, desnudo y con el cordón umbilical sin cortar.
Este caso también tuvo lugar en México, en el municipio de
San Felipe Jalapa de Díaz Oaxaca, después de que el personal médico le
negase el servicio. Desgraciadamente, también otros países protagonizan
sucesos de este tipo. Hace un año, una mujer dio a luz a un bebé en plena calle en Turquía, dejándolo abandonado sobre la acera.
