"No hay duda de que es una cantidad extremadamente grande extremadamente poderoso tifón," un funcionario de la Agencia Estatal de Meteorología dijo de la 19a tifón del año.
"Es la tormenta más fuerte que hemos tenido este año, sin duda, aunque ha perdido algo de fuerza de su pico."
La tormenta, que será el segundo tifón en Japón en una semana, fue al sur de Okinawa y moviéndose hacia el norte a 15 kph (9 mph) con vientos sostenidos de 185 kph (114 mph) a partir del viernes por la tarde, dijo la agencia.
El tifón se está moviendo muy lentamente, lo que aumenta el peligro de deslizamientos de tierra e inundaciones.
Era probable que sea más cercana a Okinawa a última hora del sábado o el domingo temprano.
Las emisoras mostraron imágenes de los residentes en Minami Daitojima, un sureste isla de Okinawa, tapar las ventanas antes de la tormenta.
Los funcionarios del gobierno se establecieron reunirse el viernes por la noche para coordinar su respuesta, el secretario jefe del gabinete Yoshihide Suga dijo en una conferencia de prensa regular.
"Hacemos un llamado a todos los ciudadanos a prestar mucha atención a los informes meteorológicos y responder rápidamente si las autoridades les aconsejan evacuar", dijo Suga.
Se esperaba que el tifón a debilitarse a medida que se trasladó al norte, sin embargo, y es probable que toque tierra el domingo en Kyushu, antes de moverse hacia el noreste de Honshu, donde es probable que se debilite en una tormenta tropical. Tokio fue fijada para las fuertes lluvias, en el peor.
Tropical Storm Risk, que rastrea los tifones, etiquetado Vongfong un tifón de categoría 4, establecido para debilitar a la categoría 2 antes de llegar a Kyushu.
No hay plantas nucleares en Okinawa, pero hay dos en Kyushu y uno en la cercana Shikoku, que también puede ser golpeado. Todos se detuvieron en la actualidad hasta que puedan pasar a nuevas pruebas de seguridad reforzadas después de la catástrofe de Fukushima.
La planta nuclear de Fukushima N º 1, paralizado por el megaquake y el tsunami en 2011, es probable que veamos la lluvia en el peor.
Vongfong, que significa "avispa" en cantonés, estaba siguiendo el camino de la Phanfone, un tifón que pisó el continente el lunes, interrumpiendo el transporte y provocando advertencias de evacuación de cientos de miles de personas. Siete personas murieron, entre ellas tres aviadores estadounidenses arrastrada por el mar y un hombre que murió mientras se navega.
Refinador Nansei Sekiyu KK, que es propiedad en su totalidad por la brasileña Petrobras, suspendió las operaciones de atraque marinos en su Nishihara refinería de 100.000 barriles por día en Okinawa el jueves, pero las operaciones de refinación de crudo no se vieron afectados.
Más de 1.000 trabajadores de rescate intensificaron la búsqueda de los últimos ocho personas que desaparecieron en la erupción del Monte Ontake, con la esperanza de avanzar antes de que llegue la tormenta.
No es habitual que dos tifones que golpearon en una sucesión tan rápida, dijo el funcionario de la Agencia Meteorológica, pero agregó que el número total de este tipo de tormentas no había aumentado.
"Es más una coincidencia que otra cosa, debido principalmente a la forma en que los sistemas de alta presión se encuentran fuera de Japón este año."
De dos a cuatro tifones tocan tierra en Japón cada año.
