El otoño es, junto con los meses anteriores al monzón, la época del año que el Himalaya recibe más visitantes. En estas semanas el clima es más estable en el alto Nepal, cuyos senderos son recorridos por miles de excursionistas y turistas aficionados al trekking. Este año no ha sido así. La llegada del violento ciclón Hudhud, que hace unas semanas golpeó el Golfo de Bengala y a su paso por la India causó 20 muertes, ha alcanzado este país asiático, desencadenando fuertes tormentas que han llenado de nieve sus montañas.
La mayoría de los desaparecidos son turistas, pero también hay sherpas, pastores y campesinos locales se encuentran desaparecidos. Los equipos de rescate y cuerpos especializados del Ejército nepalés han empezado la evacuación de las víctimas, algunas de las cuales ya están internados en hospitales de Katmandú. Varios helicópteros se han desplazado desde la capital, aunque la inestabilidad del clima ha obligado a suspender las operaciones varias ocasiones.
Los 24 cuerpos rescatados pertenecen a ciudadados neozelandeses, israelitas, indios y polacos, así como a varios nepaleses. Al momento de cerrar este despacho no existen noticias de ningún español afectado por el desastre.
Trekking del Annapurna
El entorno del Annapurna, pico de ochomil metros y el décimo más elevado del mundo, ha sido una de las zonas más afectadas. Alrededor de esta montaña famosa por su letalidad entre los alpinistas, se sitúa el que puede ser el trekking más famoso y anhelado del mundo: la vuelta de los Annapurnas. El recorrido, que puede durar entre 9 y 25 días, según sus variantes, pasa al pie de varios gigantes del Himalaya ycruza pasos montañosos por encima de cinco mil cuatrocientos metros.
El Thorang La es uno de estos puertos. Más de 170 personas estaban acreditadas para realizar el tramo de la ruta cuando se ha desencadenado el temporal. Lo remoto del lugar y la mala telefonía de la zona, unido a la inestabilidad del tiempo, impiden conocer con exactitud la magnitud del desastre. Las autoridades, que utilizan helicópteros para atender a las víctimas, advierten que puede haber muchos más fallecidos.
El secretario general de la Asociación de Rescate del Himalaya de Nepal, Basant B. Hamal, ha señalado que logró contactar con el templo de Muktinath, situado a más de cuatro mil metros de altura, constatando que allí esperaban el rescate varios excursionistas heridos que habían logrado alcanzarlo.
Aunque es en el entorno del Annapurna donde más letal ha resultado la tragedia, las tormentas afectan a todo el norte del Nepal, extensa región fronteriza con China donde se sitúa el Himalaya. En el Dhaulagiri, ochomil vecino del Himalaya, han desaparecido cinco alpinistas, dos de ellos eslovacos y tres sherpas, como consecuencia de las avalanchas registradas en la ruta normal de la montaña.
En otros lugares, como el distrito de Manag, una avalancha afectó a tres pastores locales, así como cuatro excursionistas canadienses y un indio. En el río Bidhi Gandaki, cercano al Manaslu, otro pico de ocho mil metros situado en la región, se busca a un trekker francés que cayó a la turbulenta corriente.
