La mujer, que ha estado hace tres semanas en Nigeria, acudió a
urgencias al filo de las cinco de la tarde con un cuadro de fiebre y ha
sido recluida en una habitación aislada
Una joven nigeriana de 18 años ha sido ingresada esta tarde en el
pabellón 15 de Valdecilla tras activarse el protocolo de ébola del
hospital. La paciente acudió a urgencias al filo de las cinco de la
tarde con un cuadro de fiebre. En el primer contacto con los médicos,
comentó que hace tres semanas visitó Nigeria, en la zona de Lagos, área
considerada como de riesgo pese a que desde finales de agosto no se ha
registrado ningún caso de transmisión del virus.
Ante la situación, el servicio de Urgencias de Valdecilla procedió de inmediato a aplicar el protocolo de ébola. Alertado
el personal, se cerró el área de recepción del centro médico, que ha
permanecido precintado hasta que la paciente ha quedado recluida en una
habitación aislada del servicio. Durante esos primeros instantes
se vivieron en esa zona hospitalaria momentos de tensión e incluso
diversas personas que estaban en consulta pudieron escuchar las órdenes
en las que requerían la activación del dispositivo."Traer los trajes",
fue la frase escuchada por quienes estaban en consulta.
La joven será trasladada al pabellón 15 del hospital, que es la
planta que el Servicio Cántabro de Salud (SCS) ha habilitado para tener
lista ante cualquier posibilidad de un contagio en Cantabria. A ella se
accede por una puerta lateral próxima (pero independiente) a la entrada
de Urgencias y un circuito de pasillos que implica dos cambios de
planta en ascensor.
Una acompañante de la paciente ingresada esta tarde en Valdecilla, que no registra ningún síntoma, ha sido enviada a su domicilio donde se le está aplicando el protocolo de aislamiento y control periódico.
Todas las medidas tomadas esta tarde se dirigen "a valorar un caso
que cumple los criterios de sospecha de infección acordados entre el
Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas".
Salud Pública considera que las probabilidades de que esta mujer haya
contraído el virus Ébola durante su estancia en el país africano es
mínima, pues desde finales de agosto no se ha notificado ningún caso de transmisión de la infección.
El hospital Valdecilla ya se había preparado ante una eventualidad como ésta y hay establecido un protocolo más rígido que el inicial, que afecta a la plantilla del centro y de las empresas contratistas, y que proporciona las normas de actuación ante un paciente con enfermedad de ébola, «sospechada o confirmada».
El cambio más importante ha sido la inclusión entre las causas de
contagio de una tercera vía de transmisión: «la vía aérea por gotas
gruesas. Unido a generadas al hablar o toser» a menos de un metro de
distancia. Junto a estos casos los otros de contagio ya contemplados
hasta ahora: contacto directo con un fluido del paciente (sudor, sangre,
orina, heces, vómitos, lágrimas...) y del contacto indirecto con un
objeto contaminado por esos mismos fluidos.
Aunque el documento elaborado en Valdecilla recalca que el ébola no
es transmisible por aire a distancia (aerosoles) ni por insectos, se
avisa a los trabajadores de este riesgo que en el protocolo anterior
figuraba como «no demostrado» y «no descartable». Asimismo, se detallan
de forma más clara los criterios clínicos (fiebre a partir de los 38,3ºC
y evidencia de sangrado externo o interno u otras síntomas como
cefalea, vómito, diarrea...), que deberán ir acompañados siempre de
criterios epidemiológicos (averiguar si el paciente ha estado en algunos
de los países con ébola o en contacto con personas con sospecha o
confirmación de contagio).
Los 250 nuevos trajes de protección para el personal de Atención Primaria se han empezado a distribuir hoy
en los centros de salud, donde reina el desasosiego. Y con ellos
llegará el recordatorio de recomendaciones y medidas recogidas en el
protocolo.