Un vuelo de Air France procedente de Guinea Conakry fue
inmovilizado hoy durante dos horas en el aeropuerto parisino de Charles
de Gaulle por la sospecha, finalmente falsa, de que uno de sus pasajeros
podía estar contagiado por el virus de ébola, confirmaron fuentes de la
aerolínea. Los miembros de la tripulación pensaron que uno de los
viajeros podría estar infectado tras constatar el estado de uno de los
baños del aparato, y alertaron a los servicios sanitarios del
aeropuerto, que tras someter a todos los pasajeros a un examen médico
comprobaron que la sospecha estaba infundada.
En el avión, que unía Conakry con París mediante una escala
en Nuakchot (Mauritania), viajaban 11 miembros de la tripulación y 187
pasajeros, y todos ellos fueron sometidos a un control de temperatura.
El aparato aterrizó en la capital gala a las 05.28 hora local (03.28
GMT), y estuvo dos horas en cuarentena, precisó una fuente de la
compañía aérea.
El virus del ébola, que surgió por primera vez en 1976 en
Zaire (actual República Democrática del Congo) y Sudán, se transmite por
contacto directo con la sangre y los fluidos y tejidos corporales de
las personas o animales infectados. La Organización Mundial de la Salud
(OMS) informó este miércoles de que el número de casos sospechosos
asciende en Guinea Conakry a 134 y el de muertos a 84, por un brote que
se inició el pasado 22 de marzo y que se ha extendido también a Liberia,
donde el número de víctimas mortales se ha elevado a siete.