“Es increíble lo que está ocurriendo, otros años
ha habido alto oleaje pero nunca como ahora. Mucha gente se está
movilizando a bordo de canoas donde pasaba la carretera, el mar ha
inundado unas cuatro manzanas de Jiquilillo y Padre Ramos”, dice Carlos
Manuel Díaz, sobre las olas de hasta 14 pies de altura que persisten en
el Pacífico, principalmente en Corinto, Pasocaballos, Jiquilillo,
Aserradores, Mechapa, Padre Ramos y el Golfo de Fonseca.
En Jiquilillo y Padre Ramos 20 familias fueron evacuadas. “Los vientos están muy fuertes y las olas han destruido 14 viviendas, otras están inundadas porque el mar se ha metido varios metros en las localidades”, agregó Díaz, al confirmar que el el muro de contención del balneario de Jiquilillo se lo llevó el mar, a eso de las 2:40 p.m. de ayer, impidiendo el tránsito vehicular.
En tanto, el líder comunitario Porfirio Castillo reportó 13 familias evacuadas en Venecia, y la movilización de otras 400 personas que se encontraban en Jiquilillo y en Padre Ramos.
En Corinto se reportan daños en los muros y en los techos de cinco restaurantes; y en Pasocaballos las olas han inundado varios ranchos.
Pesca paralizada
Felícito Orozco, pescador de Mechapa, coincidió en que el fenómeno ocurre todos los años, pero que esta vez se manifiesta con mayor intensidad, ya que antes las olas alcanzaban 10 pies de altura.
“Aquí la mayoría de los 60 pescadores no han salido a trabajar para evitar naufragios, seis lanchas resultaron destruidas... Un pescador gana promedio C$150 diarios”, indicó.
Esperan que el mar se calme
El capitán de navío Antonio Salvador Santos, jefe del Distrito Naval del Pacífico, aseguró que entre la 1:30 y las 4:00 a.m. del lunes realizaron patrullaje en la franja costera de Corinto, y notaron una disminución del oleaje, “pero la naturaleza es impredecible. Tal como lo asegura el Ineter, este fenómeno puede durar varias horas o días”, refirió.
En las costas de León, Margarita Hernández, de la Oficina de Riesgo de la Alcaldía, dijo que a pesar del fuerte oleaje no hay familias evacuadas.
En Jiquilillo y Padre Ramos 20 familias fueron evacuadas. “Los vientos están muy fuertes y las olas han destruido 14 viviendas, otras están inundadas porque el mar se ha metido varios metros en las localidades”, agregó Díaz, al confirmar que el el muro de contención del balneario de Jiquilillo se lo llevó el mar, a eso de las 2:40 p.m. de ayer, impidiendo el tránsito vehicular.
En tanto, el líder comunitario Porfirio Castillo reportó 13 familias evacuadas en Venecia, y la movilización de otras 400 personas que se encontraban en Jiquilillo y en Padre Ramos.
En Corinto se reportan daños en los muros y en los techos de cinco restaurantes; y en Pasocaballos las olas han inundado varios ranchos.
Pesca paralizada
Felícito Orozco, pescador de Mechapa, coincidió en que el fenómeno ocurre todos los años, pero que esta vez se manifiesta con mayor intensidad, ya que antes las olas alcanzaban 10 pies de altura.
“Aquí la mayoría de los 60 pescadores no han salido a trabajar para evitar naufragios, seis lanchas resultaron destruidas... Un pescador gana promedio C$150 diarios”, indicó.
Esperan que el mar se calme
El capitán de navío Antonio Salvador Santos, jefe del Distrito Naval del Pacífico, aseguró que entre la 1:30 y las 4:00 a.m. del lunes realizaron patrullaje en la franja costera de Corinto, y notaron una disminución del oleaje, “pero la naturaleza es impredecible. Tal como lo asegura el Ineter, este fenómeno puede durar varias horas o días”, refirió.
En las costas de León, Margarita Hernández, de la Oficina de Riesgo de la Alcaldía, dijo que a pesar del fuerte oleaje no hay familias evacuadas.