Los terremotos que azotan desde el pasado jueves la costa oeste de Nicaragua han dejado por el momento un saldo de dos fallecidos, 41 heridos y más de 1.500 evacuados, según el informe preliminar de daños de la Defensa Civil del Ejército del país, que cifra en 3.700 las casas dañadas por los seísmos.
Entre los datos destaca la inclusión de una nueva víctima mortal,
sin embargo, no se especifican más datos al respecto. También se han
detectado 32 hospitales o centros de salud con fisuras en su
infraestructura desde el terremoto de magnitud 6,2 registrado el pasado
10 de abril --al que han seguido varios temblores intensos.
El informe añade que hay 300 metros de tendido eléctrico caídos,
17 muros afectados, cinco derrumbes y tres albergues activados para
atender a toda la gente que ha tenido que salir a la calle a dormir por
miedo a que sus viviendas se derrumbaran.
El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, decretó la alerta roja
en todo el país. "Pasamos a alerta roja porque nos ha sacudido un
terremoto, con una intensidad mucho menor que la del terremoto de la
Centroamérica de 1968, pero igual a la de 1972, la diferencia es que las
fallas que se activaron no son las de Managua, ni su epicentro fue en
Managua", explicó.
Sin embargo, la continuación de las réplicas y la localización de
las últimas, en la zona de la falla del Estadio, han hecho pensar a las
autoridades que la misma puede estar activa una vez más.
El texto presentado por la Defensa Civil concluye que es
fundamental mantener los niveles de vigilancia y monitoreo de los
sucesos, en coordinación con el Instituto Nicaragüense de Estudios
Territoriales (INETER), a través del sistema de comunicaciones de
emergencia.
De la misma forma, insta a seguir trabajando en el traslado de los
suministros humanitarios, la evacuación y la recogida de escombros en
los municipios afectados, según informa la emisora local 'La
Primerísima'.