Había salido el miércoles para realizar una travesía al pico Alba y su mujer dio la alerta el viernes tras no poder contactar con él
Un montañero vasco de 58 años, J. I. U., perdió la vida el viernes al despeñarse por una ladera helada situada en el pico del Alba, en el término de Benasque. Un equipo de rescate de la Guardia Civil halló su cadáver a mediodía de ayer, cerca del sendero que lleva a los ibones del Alba.T ras dos horas de búsqueda, los miembros del equipo, que habían salido de Benasque, encontraron un gorro y un bastón en una canal de nieve. El cuerpo del montañero fue hallado minutos después en una pendiente de unos 45 grados. Presentaba varias lesiones, algunas de ellas mortales.
Los especialistas de la Benemérita pidieron refuerzos, dado que, al tratarse de una zona muy agreste, la operación de traslado ofrecía mucho riesgo. Finalmente, el helicóptero del cuerpo realizó una complicada aproximación al punto donde se hallaba la víctima, que fue introducida en la aeronave y trasladada a la helisuperficie de Benasque.
El aviso para la búsqueda del infortunado montañero fue dado por la esposa del fallecido, que telefoneó a la Guardia Civil de Huesca el viernes por la noche y explicó que su marido había ido el miércoles a hacer montaña a la zona de Benasque y que no tenía noticias de él.
Por otro lado, un equipo de rescate de la Benemérita de Panticosa rescató ayer a otro montañero accidentado en la ruta hacia el pico de los Infiernos, en el municipio de Sallent de Gállego, en un paraje conocido como el ibón de la Sartén. La víctima, de 51 años y residente en Navarra, había sufrido una caída y no podía seguir andando debido a un fuerte dolor en una rodilla.
En la misma operación fue rescatado otro excursionista que iba con el herido, asimismo navarro y de 51 años, el cual se hallaba ileso. La Guardia Civil de Huesca indicó que el dispositivo tuvo dificultades debido a que la niebla impedía al principio volar en helicóptero.
