Una densa tormenta de
arena embistió el lunes la capital iraní, bloqueó el sol con una nube
arremolinada y derribó árboles, dejando por lo menos cuatro muertos y 30
heridos.
La tormenta golpeó Teherán con
vientos de hasta 110 kilómetros (68 millas) por hora, informó la
televisión estatal. Según su informe, la tormenta provocó la muerte de
cinco personas, mientras que la agencia de noticias oficial iraní IRNA
dijo que cuatro personas fallecieron y que los vientos alcanzaron 130
kilómetros por hora (80 mph). La discrepancia no se pudo resolver de
inmediato.
La tormenta derribó árboles y sumió
a la capital en la oscuridad durante varios minutos. También causó un
accidente en cadena de 20 vehículos en una autopista al sur de la
capital y la cancelación de vuelos internacionales, según el informe de
la televisión. Los controladores aéreos desviaron varios vuelos
nacionales hacia el centro de Irán.
Las
autoridades pidieron a los niños y a los ancianos, así como a aquellos
con problemas de corazón, permanecer en el interior debido a la arena.
El
informe de la televisión dijo que los fuertes vientos también azotaron
partes del centro de Irán, pero no se reportaron víctimas allí.