Los viajeros de los trenes hotel Madrid-Ferrol y Barcelona-Vigo
tuvieron que completar viaje en autobús. El servicio estuvo interrumpido
entre las cuatro y veinte y las nueve y veinte de la mañana.
Un robo de cable eléctrico en la vía del tren
obligó a interrumpir durante cinco horas esta madrugada la circulación
ferroviaria entre León y Galicia. Tres trenes de viajeros de largo
recorrido y otros dos de media distancia se vieron afectados por el
corte. Los pasajeros fueron transbordados por Renfe en autobuses para
que completasen el recorrido por carretera.
El robo de cable se produjo a las cuatro y veinte
de la madrugada entre las estaciones leonesas de Porqueros y Brañuelas.
Los ladrones cortaron la conducción de la catenaria, que proporciona
electricidad a los trenes que circulan por esa vía. Personal del Adif
trabajó en la zona durante horas hasta que a las nueve y veinte de la
mañana consiguió restablecer el suministro eléctrico y el tramo afectado
volvió a entrar en servicio.
Poco después del robo tenía que pasar por allí el
tren hotel Madrid-Ferrol. Los maquinistas tuvieron que hacerlo
retroceder hasta Porqueros y Renfe envió autobuses hasta esa localidad
para que los viajeros continuasen por carretera hasta sus destinos.
También se vio afectado el tren hotel
Barcelona-Vigo, que se detuvo en Astorga, desde donde salieron los
autobuses que permitieron a los pasajeros continuar el viaje.
El tercer tren de larga distancia que tuvo que
interrumpir su servicio no incluía paradas en Galicia. Se trata del
Alvia Ponferrada-Madrid. Sus usuarios fueron trasladados desde la
estación de Brañuelas por carretera hasta León, para que desde allí
pudiesen continuar hacia Madrid en otro tren.
La interrupción del servicio afectó también a un
tren de media distancia que comunica León con Ponferrada, Ese servicio
fue cubierto por autobuses entre Astorga y Ponferrada.