Los puertos de Lunada, Palombera, Fuente del Chivo y La Sía
permanecen cerrados al tráfico y en once carreteras de la región se
precisan cadenas para circular
Las carreteras cántabras vuelven a ser un día más las principales
víctimas del temporal que azota estos días Cantabria. La nieve obliga a
mantener cerrados desde primera hora de la mañana cuatro puertos de
montaña, obliga a usar cadenas en ocho carreteras de la región y, lo que
es más problemático, ha restringido
el paso de camiones y vehículos articulados por la A-67, entre Pesquera
y Mataporquera, especialmente en el Puerto de Pozazal, donde los vehículos que circulan lo tienen que hacer con cadenas.
El tramo de la A-67 afectado por el corte va del kilómetro 153, a la
altura de Molleda, hasta el límite con Castilla y León. Las patrullas de
la Guardia Civil de Tráfico se encuentran embolsando a todos los
camiones, vehículos articulados y autobuses a la altura de Arenas de
Iguña. En la vertiente castellano-leonesa se está realizando la misma
operaciòn. A pesar de las fuertes inclemencias, Tráfico informa de que
no se han producido accidentes graves.
Otra de las principales arterias de comunicación de la
región se ha visto afectada por el temporal. Las precipitaciones y la
acumulación de granizo de las últimas horas ha obligado a intervenir a
las máquinas quitanieves en la A-8, a la altura de Cabezón de la Sal y de Reocín.
La nieve acumulada en la calzada también ha obligado a
cerrar los puertos de Lunada, Alto del Chivo y La Sía, a los que hay que
sumar el de Estacas de Truebas, por obras.
Las cadenas son obligatorias para
circular las carreteras regionales de Matanela (CA-633), Alto del
Caracol (CA-264), Palombera (en el tramo que une Valle Cabuérniga,
Espinilla y Salcedillo), Alto Campoo, Alto del Bardal (CA-284), así como
entre Reinosa y Corconte (CA-171), Pozazal y Polientes (CA-272)) y
Matamorosa y Arija (CA-730).
Según informa la DGT, hasta el momento no se han producido
incidencias graves en los viales cántabros, pero sí que han tenido que
intervenir por pequeñas colisiones, salidas de pista y algún que otro rescate, como el realizado en Hornada de Ebro (Campoo de Enmedio),
donde agentes de la Guardia Civil han tenido que rescatar a los
ocupantes de un vehículo atascado en la nieve y posteriormente les
trasladaron a Reinosa. En el mismo municipio de la comarca campurriana
un ehículo atascado tuvo que ser rescatado por los agentes.
El último parte del Centro de Coordinación de Emergencias
del Gobierno de Cantabria, correspondiente al período que va desde las
siete de la tarde de este viernes y las seis de la mañana de este
sábado, ha registrado doce incidencias provocadas por el temporal.
En cuanto al resto de inclemencias, está activada una alerta en el interior por nevadas y otra en la costa por fuertes vientos,
no se han producida incidencias reseñables. Además, el Gobierno de
Cantabria informa que el estado de los ríos se mantiene en niveles
"normales"