Dos viviendas fueron desalojadas por la cercanía del fuego -Medio Rural desplazó siete brigadas y cuatro helicópteros - Fueron dos horas de angustia en la parroquia de O Viso
Un virulento incendio forestal arrasó ayer parte del monte de A Peneda, que marca el límite entre los municipios de Redondela y Soutomaior. La falda de la parroquia de O Viso fue la más afectada, pero el fuego llegó a alcanzar las otras laderas, lindantes con Arcade y Alxán. Las llamas se aproximaron al límite de varias casas y la Policía Local desalojó dos de ellas, si bien no hubo daños personales. Las primeras estimaciones calculan una superficie quemada de cuatro hectáreas, aunque parecen ser más.El fuego se declaró sobre las 16.45 horas. La Policía Local fue la primera en acudir a la llamada de auxilio. A la vista de las llamas que se acercaban a viviendas en el lugar de O Castro, la patrulla ordenó que se retirasen los coches del camino y desalojó de sendas casas a tres niños y una mujer mayor.
El concejal de Interior de Redondela, Arturo González, explicó que enseguida acudió al foco un equipo del Servicio de Emergencias (SEIS), que justo estaba en ese momento en Outeiro das Penas, en Cesantes, sofocando otro incendio. El viento que por la tarde soplaba fuerte extendía las llamas A Peneda arriba con gran rapidez.
Fue necesaria la intervención de los equipos de extinción de la Consellería de Medio Rural para atajar lo que se perfilaba como una tragedia. El fuego ascendía hacia la ermita, donde precisamente hoy y mañana se honra a la santa. El alto de A Peneda es un emblema para la comarca, además de un mirador excepcional sobre la ría de Vigo.
Labores de extinción
Coordinados por el 112, al lugar se desplazaron siete brigadas, cinco motobombas, cuatro helicópteros y un hidroavión. Esta última aeronave no llegó a actuar debido a la presencia de tendido eléctrico. Poco después se sumaba un grupo de los Bomberos de Vigo.
Mientras, agentes de la Guardia Civil, Policía Local y Nacional impedían a los curiosos subir al monte. La gran columna de humo que ya se veía sobre A Peneda alertaba a los vecinos de los alrededores.
En unas dos horas las llamas quedaron sofocadas. El concejal de Interior de Redondela no quiso pronunciarse sobre el posible origen del fuego, aunque reconoció "sospechas" de intencionalidad.
El alcalde de Soutomaior, Agustín Reguera, declaró por su parte que "por un momento volvieron los fantasmas del año 2006 [cuando otro incendio arrasó A Peneda]. Los focos de Arcade y Alxán eran de menor magnitud y se pudieron sofocar pronto, lo que permitió centrar los esfuerzos en A Peneda". El regidor agradeció "a todos los vecinos y miembros de las brigadas de extinción su rápida intervención".