La fuerte tormenta de nieve que ha azotado este viernes el noreste de Estados Unidos con temperaturas peligrosamente bajas, ha causado la muerte de al menos tres personas, retrasos y cancelaciones de miles de vuelos y paralizaciones en los viajes por carretera.
La primera gran tormenta del invierno boreal del 2014, que también
 llevó al cierre de escuelas y oficinas del Gobierno, generó 
temperaturas gélidas y fuertes vientos desde la parte baja del Valle de 
Misisipi hasta la costa atlántica, con cerca de 60 centímetros de nieve 
en algunas áreas de Massachusetts.
Grandes ciudades como Nueva York, Boston, Washington D.C. y 
Portland se vieron afectadas por la caída de grandes cantidades de 
nieve.
Aunque la remoción de la nieve no sería tarea complicada, 
autoridades advirtieron a los residentes que esperen un clima 
inusualmente frío en toda la zona del medioeste y el noreste.
Minnesota registró el viernes temperaturas de 38 grados bajo cero,
 lo que significó una lectura récord para Estados Unidos fuera de 
Alaska, según el Servicio Meteorológico Nacional.
"Las temperaturas para esta noche y mañana serían muy bajas", dijo
 el gobernador de Massachusetts, Deval Patrick. "Estas son condiciones 
peligrosas", agregó.
El pronóstico para Boston era de -20 grados centígrados, mientras que Nueva York esperaba por -16 grados.
Gran parte del noreste sufrió fuertes nevadas y la temperatura 
descendió bruscamente el jueves por la noche y la madrugada del viernes,
 dijo Jared Guyer, un meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional.
Unos 2.452 vuelos fueron cancelados y 4.012 retrasados el viernes, según FlightAware.com.
El aeropuerto John F. Kennedy de Nueva York suspendió sus 
operaciones, y las tres terminales aéreas de la ciudad preparaban 
cientos de catres para los pasajeros demorados.
El aeropuerto internacional de Boston dijo que hasta un cuarto de sus vuelos programados fueron cancelados el jueves.
"Tenemos nuestras pistas, corredores y carriles de taxi limpios", 
dijo Ed Freni, director de aviación del aeropuerto de Boston. "Vamos a 
volver a operaciones normales para mañana".
MUERTES
El clima fue un factor determinante en al menos tres muertes. En 
Kentucky, una mujer de 50 años murió el jueves por la mañana tras perder
 el control de su auto en una calle congelada cerca de South Williamson,
 según la policía estatal.
Por otro lado, la policía descubrió el cuerpo de una mujer de 71 
años que sufría de Alzheimer y deambulaba en el oeste rural de Byron, en
 el estado de Nueva York, con vestimenta inapropiada para temperaturas 
de un solo dígito, según informó la oficina del alguacil del condado de 
Genesee.
Un trabajador de la ciudad de Filadelfia murió después de que una 
máquina que estaba usando fue aplastada por un montículo de roca de sal 
utilizada para el deshielo, informó NBC News.
En Chicago, un hombre estaba en estado crítico después de que fue 
sacado por los bomberos desde las aguas heladas del Lago Michigan.
PRUEBA PARA EL NUEVO ALCALDE NEOYORKINO
La tormenta plantea el primer gran reto para el nuevo alcalde de 
Nueva York, Bill de Blasio. Los problemas derivados de tormentas de 
nieve han provocado estragos políticos para alcaldes de la ciudad más 
grande de Estados Unidos durante décadas.
El alcalde dijo en un comunicado que unos 2.500 quitanieves 
estaban en las calles de la ciudad más grande de Estados Unidos e instó a
 los neoyorquinos a quedarse en casa. "Esta ha sido y continúa siendo 
una tormenta peligrosa", dijo de Blasio.
El edificio de Naciones Unidas en Nueva York y las cortes 
federales en Nueva Jersey cerraron, al igual que las escuelas públicas 
en Nueva York, Hoboken, Jersey City (en Nueva Jersey) y en Boston y 
Providence, Massachusetts.
Finalmente, la Oficina de Personal dijo a miles de trabajadores 
federales en Washington que podían cumplir sus tareas desde casa o tomar
 el día libre debido a la tormenta.
