El Gobierno francés estaría dispuesto a tomar medidas si el «descontrol» y «propagación» del coronavirus se prolongase o agravase en la Comunidad autonómica
Jean Castex, primer ministro del Gobierno de Emmanuel Macron, evocó tal eventualidad la mañana del sábado, declarando en el mercado de Prades (6.100 habitantes, Pirineos Orientales), a cien kilómetros de la frontera de La Junquera: «Las cifras de Barcelona son mucho peores de las que observamos en Francia. Nos inquieta y debemos discutir el problema con las autoridades españolas».
Castex sigue siendo alcalde de Prades, su feudo político personal, una pequeña localidad altamente simbólica, en una región donde se teme una eventual propagación del virus, eventualmente «importado» por los viajeros que pudieran llegar de Barcelona y el resto de Cataluña.
Las imágenes
de millares de vehículos «huyendo» de Barcelona, la mañana y tarde del sábado,
han causado un cierto impacto en los medios audiovisuales franceses, donde se
ha repetido en numerosas ocasiones el «riesgo» que pudieran correr las regiones
francesas si ese tráfico terminara atravesando la frontera.
Castex declaró a la prensa regional de los Pirineos Orientales que «por ahora» la situación local «no es grave», agregando: «Pero debemos ser vigilantes y discutir el problema con las autoridades españolas».
Varios medios franceses estiman que Francia estaría dispuesta a volver a cerrar la frontera con España, a través de La Junquera, si la situación se complicase o agravase en Cataluña y Barcelona.