Medio centenar de pueblos se encuentran incomunicados por la tromba de agua de más de 180 litros por metro cuadrado caída en la zona de Carcasona
La inusual tromba de agua caída la pasada madrugada en el sur de Francia ha provocado graves inundaciones que han causado al menos 13 muertos, según ha confirmado el Ministerio del Interior este lunes. Una cifra que puede seguir aumentando, ha advertido el primer ministro y ministro interino del Interior, Édouard Philippe, que visitará la zona más afectada a lo largo de la jornada. También los daños materiales son “considerables” y podrían continuar empeorando, ya que el servicio meteorológico ha advertido de que las crecidas provocadas por una de las tormentas más mortíferas de la última década en Francia son ya las más fuertes en más de un siglo.La zona más afectada es la localidad de Trèbes, donde se han registrado nueve de las víctimas mortales, según el portavoz de Interior, Frédéreic de Lanouvelle, en la cadena BFM TV. Todo el departamento de Aude ha sido puesto en "vigilancia roja", la más alta, por el riesgo continuado de unas inundaciones repentinas que sorprendieron a muchos habitantes mientras dormían.
De hecho, al menos una de las víctimas fue arrastrada por las aguas enfurecidas mientras dormía, ha explicado el prefecto de Aude, Alain Thirion. En un lapso de cinco horas, "cayeron entre 160 y 180 milímetros de agua en la zona de Carcasona", la capital del departamento, ha dicho el prefecto, subrayando que esto equivale a tres meses de precipitaciones. El nivel del agua aumentó en Trèbes ocho metros en solo cinco horas. No se registraban cifras similares desde 1891. En otros municipios, los niveles son superiores a dos metros de agua.
El Ministerio del Interior ha informado de la evacuación de unos mil habitantes de la localidad de Pezens, por el riesgo tras el desbordamiento de una presa. Mientras, la prefectura de Aude advertía a vecinos de algunos barrios de localidades como Carcasona de la necesidad de ponerse a salvo en “pisos elevados”.
En total, alrededor de 700 bomberos y 160 gendarmes están desplegados por el área, ha explicado Philippe, que ha asegurado que recibe información constante de la situación y que también el presidente, Emmanuel Macron, está siendo informado puntualmente.
También han sido activados cuatro helicópteros y un avión de la seguridad civil, así como tres helicópteros de la gendarmería nacional y uno más del Ejército que realizan tareas de rescate y de reconocimiento en las zonas siniestradas. “Tenemos a personas atrapadas en los tejados. Vamos a tener que usar aeronaves para evacuarlas porque no podemos llegar hasta ellos en embarcaciones, dada la fuerza del agua, es demasiado peligroso”, explicó el prefecto Thirion.
Todas las escuelas y liceos permanecían cerrados este lunes en el departamento de Aude, donde las comunicaciones por carretera estaban gravemente afectadas. También el tráfico ferroviario permanecía interrumpido durante la mañana en varias zonas, especialmente entre Carcasona y Narbona, donde el acceso a la estación es “impracticable”, según la Prefectura.
Los servicios meteorológicos señalaron que el frente de lluvias ha provocado precipitaciones de hasta 50 litros por metro cuadrado por hora al norte de Carcasona. Météo France ha advertido en su página web de que las lluvias van a continuar y que en total se acumularán de 200 a 250 litros por metro cuadrado y "puntualmente de 300 a 350".
Las lluvias torrenciales no son un fenómeno extraño en el sur de Francia en esta época del año, pero los meteorólogos han indicado que el agua del mar excepcionalmente cálida en la cosa mediterránea del sur el país las puede estar intensificando. Francia ha experimentado el que es hasta ahora el año más cálido desde 1900, según Méteo France, que este lunes advertía de que el fenómeno registrado en la región de Aude está siendo “muy activo”.
Las devastadoras lluvias en el sur de Francia se producen tras el paso por Portugal y España de Leslie, un huracán degradado a tormenta tropical justo antes de tocar tierra en Portugal la madrugada del sábado al domingo, dejando 28 heridos leves, 61 desalojados, cientos de miles de viviendas sin electricidad y destrozos en casas y vías públicas.
Alrededor de 100.000 viviendas continuaban este lunes sin energía en Portugal. En España, donde este lunes los últimos coletazos de Leslie afectan a Cataluña y Baleares, los incidentes han sido en cambio de escasa entidad al golpear con menos intensidad de la esperada.