Al final no hay heridos o intoxicados por la densa humareda, y el fuego quedó sofocado a última hora de la tarde
La Policía Nacional ha desalojado a decenas de vecinos en un incendio producido en un noveno piso en la calle Pizarro de Vigo. El fuego, de importancia considerable, comenzó a las 19.40 horas y los agentes han tenido que desalojar el edificio para evitar daños personales. La calle fue acotada por la policía para facilitar las maniobras y trabajos de los bomberos.Los bomberos explicaron que el foco del fuego está situado en el salón, que quedó calcinado. El humo dañó al resto de la casa. No fue necesario rescatar a nadie de su vivienda pero sí tuvieron que desalojar a los residentes en los pisos superiores y también los inferiores a causa de la densa humareda en el interior del edificio.
Según la policía, el fuego comenzó de forma fortuita en la vivienda y como se produjo mucho humo se desalojó la vivienda de manera preventiva. Al final no hay heridos o intoxicados por la densa humareda como temían las fuerzas del orden y solo fueron momentos de miedo que sintieron los moradores.
Los bomberos han sofocado las llamas que salían de un décimo piso en el número 47 de la calle Pizarro, el último del edificio. Los testigos aseguran que no oyeron ninguna explosión pero que cuando escucharon las sirenas de los bomberos vieron salir muchas llamas, posiblemente de una habitación, y que carbonizaron la cornisa del inmueble. También vieron llegar varias ambulancias. A las 20.00 horas, las llamas estaban apagadas pero los bomberos siguieron haciendo actuaciones, en una labor que consideran complicada.
La encargada de una confitería explicó que decenas de residentes del edificio se agolpan en la calle con lo puesto y algunos se han refugiado en su negocio. Asegura que «no ha pasado nada, nos dicen que todo el mundo está bien, pero pudo haber sido una desgracia porque las llamas salían por la ventana de un noveno piso con mucha fuerza pero todos pudieron salir de allí porque los sacó la policía». En la calle, además de residentes desalojados hay policías y bomberos.
Algunas vecinas también se preocuparon por poner a salvo a sus mascotas, sobre todo perros de compañía.
Los moradores, que estuvieron en la calle bajo la lluvia, regresaron a sus viviendas a las 21.00 horas. La residente en el piso dañado, cubierta con una manta térmica, no se podía explicar qué es lo que había sucedido para que ardiese su vivienda.