Una hora después de la sentida declaración de Obama en la televisón nacional, unas 200 personas se manifestaron frente a la Casa Blanca pidiendo restricciones en la tenencia de armas.
Las esperanzas sobre una aproximación de Obama a un cambio legal relativo a la posesión de armas se dispararon tras la reelección del presidente, que se ha mostrado favorable a una mayor restricción, y que ahora no tendrá la presión de consecuencias políticas para abordar una posible reforma de la legislación.
A pesar de esto, el presidente aún se enfrenta a una mayoría republicana en la cámara que podría frenar estas reformas.
El alcalde de Nueva York reclama una nueva ley
El alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, ha reclamado este viernes que se apruebe una ley para controlar las armas e impedir que se perpetren masacres como la cometida en la escuela de primaria Sandy Hook de New Port (Connecticut), en la que han muerto 28 personas.
En un comunicado, Bloomberg ha subrayado que cada día que pasa sin que se apruebe una norma al respecto "mueren 34 personas asesinadas" y ha hecho hincapié en que hace falta "una acción inmediata" para impedir nuevas tragedias.
"Ni siquiera los jardines de infancia con su enseñanza de A,B,C son seguros. Escuchamos tras Columbine que era demasiado pronto para hablar de una ley de armas. Lo escuchamos después de (la tragedia de) Virginia Tech. Tras (los tiroteos de) Tucson y Aurora y Oak Creek. Ahora volvemos a escucharlo. Cada día que esperamos, otras 34 personas son asesinadas con pistolas", ha dicho.
Pide acciones
Tras recordar que el presidente estadounidense, Barack Obama, ha trasladado sus condolencias por lo sucedido, ha subrayado que Estado Unidos "necesita" que el Congreso apruebe una ley "para resolver este problema".
"Pedir acciones con significado no es suficiente. Necesitamos una acción inmediata. Ya hemos escuchado antes toda la retórica", ha subrayado.
El alcalde de Nueva York ha asegurado que no ha habido un "liderazgo" ni en el Congreso ni en la Casa Blanca para atajar este problema. "Esto tiene que acabar hoy. Es una tragedia nacional y requiere una respuesta nacional", ha dicho. "Mis más profundas condolencias a las familias y mi determinación más fuerte que nunca para parar esta locura", ha concluido.