La orografía y el fuerte viento complican la extinción de las llamas en el término abulense
Diez medios aéreos y numerosos terrestres luchan desde el mediodía de ayer en el municipio abulense de Navalacruz, de poco más de 200 habitantes, para tratar de sofocar el incendio que se declaró ayer en torno las 13.40 horas en este término municipal situado a 44 kilómetros al sur de la capital abulense.Según informó a Efe el delegado territorial de la Junta, José Francisco Hernández, las llamas se encuentran en una «zona escarpada y con vegetación ribereña», a la que resulta complicado acceder por tierra.
Hernández reconocía a última hora de la tarde de ayer que los trabajos estaban resultando «complicados por el viento cambiante», lo que había propiciado la intervención de «numerosos medios» aéreos y terrestres. De hecho, el Gobierno regional solicitó a primera hora de la tarde al Ministerio dos brigadas de refuerzo y un helicóptero bombardero.
Nada más conocer el alcance de las llamas, la Junta declaró el incendio de Nivel 1, una decisión adoptada teniendo en cuenta que los trabajos de extinción pueden superar las doce horas. Aunque las previsiones a última hora de la tarde no eran «pesimistas», el delegado territorial de la Junta se ha referido a la existencia de un «flanco más complicado por el viento» y a otro incendio en el municipio de Gallegos de Altamiros, que obligó a que el operativo doble sus esfuerzos.
En parecidos términos se manifestaba el alcalde de Navalacruz, Benigno González Casillas, quien, confirmó que el incendio se originó en el paraje conocido como Telacuillos, una zona de difícil acceso, pero no imposible, ya que cuenta con un camino.
El primer edil explicó también que varios de los frentes del fuego estaban a las 18.30 controlados, si bien a esa hora persistía uno «con una gran virulencia». Y es precisamente este frente el que más preocupaba a los efectivos que trabajan en al extinción de las llamas, ya que según recalcó el alcalde, en el caso de «saltar un camino» podría llegar a Navandrinal.
Zona arbolada
De hecho, las ráfagas de viento que había en la zona no estaban ayudando nada a la hora de sofocar el fuego, que si bien comenzó en un prado se propagó rápidamente a una zona arbolada (con robles y pinos) y que ahora se mantiene viva en un paraje de piorno y retamas. En opinión del alcalde, a falta de conocer el origen del incendio, resulta «raro» el lugar en el que ha comenzado. Por otra parte confirmó que en ningún momento ha habido riesgo para la población de Navalacruz (sí para una nave ganadera), desde donde son visibles los efectos del incendio. «El fuego está a kilómetro y medio del pueblo», dijo González Casillas.En cuanto al operativo, se sumaron a las tareas de extinción de las llamas diez medios aéreos, seis motobombas, cuatro cuadrillas de tierra, una unidad helitransportada, seis agentes medioambientales, dos técnicos y un celador. Asimismo, participaron también dos Brigadas de Refuerzo de Incendios Forestales, así como dos Cuadrillas Especialistas en la Lucha contra Incendios Forestales.
