Las rachas de viento cambiante a lo largo de la mañana han avivado las llamas que afectan a la sierra Bermeja y a los municipios malagueños de Jubrique y Genalguacil
Dos focos, con origen en Genalguacil, más de 2.000 hectáreas de superficie calcinadas y 600 personas desalojadas. Ese es por ahora el saldo que deja el gran incendio de Sierra Bermeja, que se extiende ya a los términos municipales de Estepona, Benahavís, Jubrique y Genalguacil.
El fuego se inició a las 21.37 horas de ayer en dos focos diferentes, lo que abre la posibilidad de que haya sido intencionado, extremo que tendrán que aclarar los especialistas de la Brigada de Investigación de Incendios Forestales (BIF) y el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil.
La consejera de Agricultura, Carmen Crespo, consideró «muy llamativa» la presencia de esos dos focos, que se sitúan dentro del término municipal de Genalguacil. La previsión en cuanto a las tareas de extinción «no es muy halagüeña» por las previsiones meteorológicas, reconoció la titular del departamento, que aludió a lo escarpado del terreno hacia donde se dirige y a la fuerza del viento.
El poniente, con rachas de más de 50 kilómetros por hora, y la dirección cambiante del mismo por la entrada del levante, está dificultando considerablemente el trabajo del Infoca, que mantiene desplegados en la zona a más 250 efectivos, así como 30 medios aéreos, entre aviones y helicópteros.
A mediodía de hoy jueves, las llamas se extendían ya por 2.167 hectáreas de perímetro en Sierra Bermeja. La proximidad del fuego ha obligado al Infoca a desalojar a más de 600 personas. La consejera ha informado de que ha ardido una casa ya desalojada y la terraza de un edificio.
Crespo apuntó que tiene ya la calificación de gran incendio forestal, que es cuando se superan las 500 hectáreas. En estos momentos, se está trabajando con maquinaria pesada en un doble perímetro para trazar un cortafuegos y detener los dos frentes en los que avanzan las llamas.
