En la cuenca del Oria la estación de Lasarte 
ha bajado a nivel amarillo y la de Alegia a verde y en el Bidasoa el 
retén está activo «de manera preventiva»
Las intensas lluvias caídas en las últimas 
horas han provocado el desbordamiento del río Oria a su paso por 
Andoain, Zubieta y Anoeta; y del río Kilimon a su paso por Mendaro. 
También han ocasionado que el río Bidasoa se salga de su cauce en 
Endarlatsa y que el río Urumea se desborde en Hernani. La alerta 
amarilla por intensas lluvias ha finalizado a las 12.00 horas, por lo 
que se espera que la situación mejore a lo largo de la tarde. Como 
primer indicador, algunas estaciones de la cuenca Oria muestran una 
bajada notable: la de Lasarte ha bajado ya a nivel amarillo y la 
estación de Alegia a verde, según ha indicado Euskalmet.
El río Kilimon ha vuelto a salirse de su cauce en Mendaro, 
como ya lo hiciera en diciembre, pero de momento no ha ocasionado graves incidencias. El acceso al Hospital de Mendaro permanece abierto.
El río Oria también ha vuelto a salirse de 
su cauce a su paso por Andoain, Zubieta y Anoeta. Tampoco ha habido que 
lamentar graves incidentes, como sí ocurriera el mes pasado. Sí ha 
ocasionado pequeñas inundaciones a su paso por Zubieta.
Los fenómenos costeros y las intensas 
lluvias de los últimos días han puesto en alerta a todos los servicios 
de emergencias y los de Irun no han sido una excepción. De manera 
preventiva, agentes de la Policía Local y voluntarios de Protección se 
han acercado a Behobia para comprobar el estado del río. No ha superado 
la altura de 5,13 metros, aún lejos de los 5,80 a partir de los cuales 
se empiezan a avecinar problemas. Sin embargo, por precaución, se ha 
instalado la primera de las barreras anti inundación, en el punto más 
bajo por el que el río puede entrar al barrio si se desborda, entre el 
cuerpo de guardia y el antiguo trinkete.

La previsión apunta a una pleamar (al comienzo 
de esta noche) que no será especialmente intensa y a unas lluvias que no
 irán incrementando su intensidad, por lo que cabe mirar con optimismo a
 las próximas horas, a pesar de lo cual el Ayuntamiento de Irun ha 
confirmado que mantiene activo un retén. «No vamos a bajar la guardia y 
vamos a seguir pendientes de la evolución, vigilantes ante cualquier 
cambio que se pueda producir en la situación o en las previsiones», han 
informado desde el consistorio. De momento, no se ha activado el Plan de
 Emergencia por Riesgo de Inundación y no parece que vaya a ser 
necesario hacerlo aunque los dispositivos están preparados si se diera 
la circunstancia.
En la zona de Lastaola, en el barrio de 
Bidasoa, sí se han producido desbordamientos puntuales que han afectado a
 zonas de la ribera del río pero no a ningún caserío ni vivienda. 
  Misma imagen en Zubipe y Landare
Una imagen que también se ha repetido este lunes es el de los campos de Zubipe y Landare de Hernani anegados por el agua
 tras desbordarse el río Urumea.
 En los dos casos el agua ha llegado a cubrir totalmente los campos, 
haciendo imposible nuevamente la práctica deportiva. Las dos 
instalaciones atraviesan una situación realmente preocupante con 
problemas periódicos ante las crecidas del río Urumea.
 En el barrio donostiarra de Okendotegi han tenido que volver a vaciar sus garajes ante la subida del río. 
Es la segunda vez en un mes. «Estamos hartos»,
 se lamenta Juanjo Pintos. Todos los inviernos temen por las fuertes 
lluvias, aunque en esta ocasión se han repetido en apenas cuatro 
semanas. 
Las fuertes lluvias de las últimas horas no 
solo están dificultando el tráfico en Gipuzkoa, sino que también están 
provocando el corte de carreteras. Así, la N-636 permanece cortada en 
ambos sentidos a la altura de Bergara debido a un desprendimiento, 
previsiblemente como consecuencia de las fuertes precipitaciones. 
En la tarde de ayer se cortó la N-634 
también en ambos sentidos entre Zarautz y Getaria por un desprendimiento
 y este corte continúa a estas horas. El tráfico se está desviando por 
el puerto de Meagas. 
  Afecciones al tráfico
Por otra parte, la Gi-3424 en Anoeta
 también permanece cerrada por desbordamientos puntuales del río Oria. 
Otro desprendimiento en la G-641 en Azkoitia ha obligado a cortar la 
vía, sentido Zumarraga. 
En la A-15 en Astigarraga se ha registrado 
un accidente y una persona ha resultado herida tras salirse de la 
calzada su vehículo. El suceso ha ocurrido sentido Pamplona y las grúas 
han tenido que acudir hasta el lugar del siniestro. 
La alerta amarilla por lluvias persistentes ha permanecido activa en 
Gipuzkoa hasta las 12.00 horas. A lo largo de la tarde se espera que las
 lluvias sean menos persistentes y se recupere poco a poco la 
normalidad. En este momento y hasta las 15.00 horas permanece activo el 
aviso amarillo por olas por riesgo para la navegación.