El total de hectáreas calcinadas asciende a 2.857 por un fuego que ha afectado a seis municipios tras quemar 20 casas en Gandia
El incendio declarado el lunes entre Llutxent y Pinet, en la comarca de
la Vall d'Albaida, sigue activo y sin control. Las llamas, que ya
han arrasado más de 2.600 hectáreas
tanto de masa forestal como de campos agrícolas sin uso y arbustos,
obligaron anoche a desalojar Pinet y una urbanización de Gandia. De
hecho, y según ha informado esta mañana el director general de la
Agencia de Seguridad y Respuesta a las Emergencias de la Generalitat,
José María Ángel, las llamas ya han
afectado a una veintena de casas en Montesol, Montepino y la Ermita, en el término de Gandia. Mientras, el Ayuntamiento de
Quatretonda anuncia que los vecinos que se encuentren en las casetas de la sierra deben abandonarlas y acudir al núcleo urbano.
José María Ángel ha señalado, además, que se prevé que a lo
largo del día participen en las labores de extinción 27 medios aéreos,
que ya han comenzado a incorporarse a primera hora de la mañana de hoy.
Actualmente, más de 700 efectivos terrestres se encuentran en la zona.
Los
últimos datos dados a conocer poco antes de las 13 horas sitúan la cifra total de hectáreas quemadas en casi
2.900. El municipio más afectado por extensión es
Gandia con 948,6 hectáreas, mientras que
Pinet ha visto arrasado el 68,8% de su termino municipal con las 818,6 hectáreas arrasadas de las 1.190 totales. En
Llutxent el resgitro de extensión es de 840,6 hectáreas, mientras que en
Ador han ardido 150,6 hectáreas, en
Barx 87,11 hectáreas y en
Quatretonda, 11,5.
Previsión meteorológica
La Conselleria de Agricultura anunció
que a partir de las 10.00h, la inestabilidad atmosférica podría generar
comportamientos agresivos del fuego y un crecimiento de las columnas.
Dos horas más tarde, a las 12.00h, se preveían vientos de componente
Este de hasta 40 kilómetros por hora.
Anoche, las llamas tuvieron una acción «muy convulsiva», informa, y de un «impacto tremendo
ayudadas por el viento de hasta 70 kilómetros por hora» al llegar a un barranco en zonas de los alrededores de Gandía. Por ello se actuó en urbanizaciones de los alrededores como
La Marxuquera, donde el fuego ha afectado a entre 10 y 20 casas,
La Ermita,
Montepino y
Montesol.
Visita de Ximo Puig
El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha acudido al puesto de
mando ubicado en Llutxent para ver la evolución del incendio y ha
lamentado la
concatenación de condiciones meteorológicas que han provocado que se extienda más el fuego,
como los vientos huracanados que se dieron en la noche de ayer. «La
estrategia del gobierno es la seguridad de las personas porque lo único
que no se puede recuperar es la vida de una persona», ha explicado Puig.
Sobre los desalojos, ha señalado que «pedimos a los ciudadanos que atiendas a las peticiones de las autoridades porque
es muy duro tener que abandonar la casa pero es necesario para que no haya desgracias personales«.
Por el momento
no se puede ser optimista con la evolución del incendio de Llutxent
aunque «todo depende del tiempo» y de los cambios en el viento, ha
remarcado el presidente. Además, ha agradecido al colaboración de otras
comunidades autónomas y ha resaltado la labor que están haciendo todos
los profesionales.
La
alcaldesa de Gandia, Diana
Morant, también ha subrayado la «solidaridad» de vecinos, entidades y
empresas en estos momentos tan duros para la ciudad. «Anoche se veían
mangueras de fuego incontroladas, hemos pasado mucho miedo», ha
comentado Morant que ha apuntado que todavía no se puede cuantificar de
forma exacta las viviendas calcinadas.
Por su parte, el
alcalde de Llutxent,
Pepe Estornell, ha comentado que este incendio debe de servir «para
aprender y evitar que se repita». También reconoce que debería haberse
actuado en un «bosque mediterráneo con tanta sequedad y materia».
«Este fenómeno meteorológico fue de muy pocos minutos pero fue el
mejor aliado que tiene el fuego», ha dicho el director general, quien ha
recordado que a consecuencia del incendio ya han sido desalojadas cerca
de 2.600 personas.
Los medios aéreos han salido a primera hora
de hoy coordinados por los operativos que han trabajado esta noche, lo
que permite que vayan directamente a los puntos concretos donde lanzar
el agua y los retardantes.
También se han incorporado medios de
los Consorcios de bomberos de Alicante y Castellón y bomberos de la
ciudad de Valencia, así como una unidad de la UME de Zaragoza, y también
efectivos de otras autonomías españolas.
«
Tenemos un gran trabajo hasta las once de la mañana, que es cuando no hay viento
y hemos tenido una carga de humedad durante este noche. Hay que
aprovechar estas horas, que son cortas, porque a partir de las 12 de
mediodía empiezan a elevarse mucho las temperaturas y se prevé que
vuelva a haber rachas de viento», ha dicho.
LAS CLAVES DEL MAYOR INCENDIO DEL AÑO
- 281,3
- litros por metro
cuadrado de lluvia acumula la zona del incendio en el último año
hidrológico (desde el 1 de octubre), la mitad de los valores habituales,
que ascienden a 539,7 litros.
- Altas temperaturas
- Las elevadas
temperaturas de los últimos días han sido clave para alimentar el
incendio. El lunes la zona afectada por las llamas rozó los 40 grados
(registro contabilizado en Xàtiva), mientras que ayer el mercurio llegó a
superar los 37.
- Orografía
- Las dificultades que los
equipos de extinción han tenido para llegar al foco de las llamas ha
sido otro factor clave para que se extienda el incendio. Barrancos y
caminos escarpados han convertido en misión casi imposible atajar el
fuego.
- Viento
- Rachas de viento que el
lunes rozaron los 50 kilómetros por hora en la zona del siniestro
alimentaron las llamas y aceleraron su expansión. Durante el día de ayer
amainó la intensidad, aunque los cambios de dirección también
dificultaron las tareas
- 560
- descargas procedentes de
rayos se registraron el lunes en la Comunitat, especialmente en el
interior de Valencia. El origen del fuego de Llutxent apunta a un rayo
latente.
- Parajes naturales
- El Surar, un emblemático
paraje natural de la zona se ha visto seriamente afectado por las
llamas y ha generado un tremendo malestar entre los vecinos de Pinet.
También corre peligro el paraje natural de Parpalló-Borrel y el barranco
de Lloret
- Intenso humo
- La peligrosidad de los
incendios forestales no sólo radica en las llamas. El intenso humo ha
sido el factor clave para que se hayan llevado a cabo mucho de los
desalojos. Mayores, niños y personas con problemas respiratorios,
víctimas potenciales.
- Varios frentes
- Los servicios de
Emergencias han tenido que dividir fuerzas para actuar sobre los
distintos frentes que se extendían por el zona amenazada por las llamas.
Dos de ellos, uno por el norte y otro por el sur, preocupaban
especialmente ayer.
Ayer también se produjeron precipitaciones en distintos
puntos de la Comunitat pero en la zona de Llutxent «cayeron cuatro gotas
de agua que no solo no ayudaron, sino que como iban acompañadas de fuertes vientos ayudaron al avance de las llamas».
Por su parte, la alcaldesa de Gandia,
Diana Morant Ripoll,
ha explicado, en declaraciones a Onda Cero recogidas por Europa Press,
que «los bomberos hablan de unas circunstancias que han cambiado los
protocolos de actuación porque el fuego es de una intensidad y
virulencia parecidos a los que se han visto por las televisiones en
Grecia».
La regidora ha reconocido que
para la jornada del miércoles «no se prevé que la situación sea mucho mejor a la de ayer».
«No hemos sido capaces de controlar un fuego que ha ido creciendo, que
cada vez ha ido cogiendo más superficie, no se desplazaba, solo crecía
en medio de poblaciones», ha indicado Morant quien ha reconocido que «la
decisión de desalojar dos urbanizaciones de Gandia ha salvado
probablemente muchas vidas».
Albergues abiertos
Por su parte, Cruz Roja
mantiene tres de los seis albergues que fueron abiertos este martes.
El incendio obligó a desalojar «de forma preventiva» a la población del
municipio de Pinet este martes. La noche del lunes ya se evacuó a unas
2.500 personas de la zona de La Drova y las urbanizaciones de Montesol y
Montepino.
La humedad relativa del aire en la zona a las 6 de la
mañana es algo más baja que ayer, pero el chubasco que cayó anoche entre
las 22:00 y las 22:20 ha podido humedecer algo el terreno, según Aemet.
El
112 ha recibido ya medio millar de llamadas desde que se declaró el incendio el lunes a las 14:37 horas. Fue precisamente una llamada a este número la que alertó del fuego.
Alrededor de 3.000 desalojados
Los 600 bomberos,
agentes forestales y de la Unidad Militar de Emergencias desplazados a
la zona no han logrado dominar las llamas pese a contar con el apoyo de
25 medios aéreos, por lo que anoche se mantuvo el desalojo de las zonas
afectadas -en torno a unas 2.500 personas y unos 350 inmuebles-,
especialmente de urbanizaciones de los términos municipales de Barx (La
Drova) y Gandia (Montesol, Montepinós y la Rochera), a los que se
sumaron varios centenares de desalojados más durante el día de ayer, por
lo que la cantidad ronda ya los 3.000.
Los especialistas, por la tarde, sufrieron un nuevo revés, puesto que
giró el viento del sur -a raíz de las tormentas que se reproducían por
el interior- y reactivó las llamas más próximas a Pinet, población que
sobre las siete de la tarde de ayer ya estaba totalmente rodeada de humo
y donde el centro de emergencias y seguridad de la Comunitat recomendó,
en un primer momento, el confinamiento de la población en sus
domicilios, especialmente de las personas con problemas respiratorios.
Poco más de una hora después, la dirección del Centro de Mando Avanzado
ordenaba el desalojo de la localidad de forma preventiva. Así, los
aproximadamente 160 residentes del municipio fueron evacuados a las
instalaciones del hogar del jubilado de Llutxent, donde presumiblemente
iban a pasar la noche.
Tres agentes tuvieron que recibir asistencia médica y un refugio fue pasto de las llamas
También se desalojó la urbanización de
L'Ermita en Gandia. La Policía Local del municipio emitió un aviso en el
que se rogaba que «nadie se dirija a la zona de Marchuquera Ermita ni a
Marchuquera Alta. Estamos desalojando por peligro de fuego y los medios
necesitan todos los accesos libres». Desde el ayuntamiento indicaron
que tenían constancia de que todavía quedaban personas en las
urbanizaciones Montepinós, Montesol, la Drova y la Rochera -desalojadas
el lunes-, por lo que «rogamos que hagan caso de las indicaciones de la
Policía y Guardia Civil y desalojen la zona».
En esta línea, y
también como medida preventiva y para garantizar la seguridad ciudadana,
el órgano que coordina el dispositivo anunció que las personas
desalojadas el lunes por la Guardia Civil no podrían volver a sus casas
durante la noche de ayer.
Por su parte, el Ayuntamiento de Gandia y
Cruz Roja había realojado en hoteles y albergues a 96 personas que
tuvieron que abandonar sus casas por el incendio, mientras que los 86
usuarios de la residencia de mayores Mondúver fueron trasladados a un
hotel y al Centro de Convivencia de Corea. La ONG, además, activó al
Equipo de Sensibilización e Información para atender a familias con
niños y niñas en el albergue de Baladre.
Dos carreteras continúan cortadas mientras el fuego se ceba con El Surar
Según el presidente del Consorcio
Provincial de Bomberos de Valencia, Josep Bort, el incendio contaba con
dos frentes. Mientras que por el norte se aproximaba a la localidad de
Barx, por el sur los especialistas temían que las llamas pudieran
afectar a las granjas que salpican todo el entorno. Asimismo,
permanecían cortadas dos carreteras comarcales, la CV-608 de Llutxent a Pinet y la CV-675, de Gandia a Simat.
Aulas calcinadas
El duro trabajo de hacer frente a las llamas
originó que tres agentes forestales tuvieran que recibir asistencia
médica por inhalación de humo. Además, las llamas también afectaron a
algunas construcciones. De hecho, convirtieron en cenizas el
refugio-aula de educación e investigación ambiental ubicado en el paraje
natural de El Surar, entre los términos municipales de Llutxent y
Pinet. Así, este rico entorno natural fue uno de los más afectados por
las llamas.
Ya por la noche, la lluvia empezaba a hacer acto de
presencia por la zona, por lo que alimentaba la esperanza de que a lo
largo del día de hoy se podría controlar el incendio.
Por otra
parte, el equipo de agentes medioambientales que trabaja en el grupo de
investigación de causas lograron ayer constatar gráficamente que el
origen del incendio fue la caída de un rayo sobre un árbol en la
madrugada del lunes.